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Tras 14 años de amor, Sandra Borghi se separó de su marido 

La periodista celebró sus 50 años con un emotivo discurso en el que habló sobre sus nuevos comienzos y lo que ya no quiere en su vida. Según contó Fernanda Iglesias en Puro Show, Borghi enfrentó la ruptura con fortaleza y fue quien decidió terminar la relación tras un largo desgaste.


Sandra Borghi atraviesa un momento de grandes cambios personales. Luego de 14 años en pareja con Fernando Casanello, la periodista decidió poner fin a la relación. Así lo confirmó la panelista Fernanda Iglesias en el programa Puro Show, donde compartió detalles de la ruptura.

“Hace poco festejó sus 50 años a todo trapo, él no fue al cumpleaños, pero sí fue la hija de él“, relató Iglesias. Según contó, fue un momento cargado de emoción: “Cuando ella habló frente a sus invitados, la nena lloraba... La decisión fue de Sandra porque se dio cuenta que hubo un desencuentro en la pareja, un desgaste. Fueron 14 años, es bastante”.

La separación, lejos de haber sido impulsiva, habría sido muy meditada por Borghi. “Le costó mucho tomar la decisión porque pensaba que era su hombre para toda la vida. Sandra es buena mina, es buena periodista, y se está bancando ahora la separación con mucha entereza. Anoche fueron a cenar con todos los chicos afuera”, agregó la periodista.

En su fiesta de cumpleaños número 50, Borghi leyó un discurso frente a sus invitados donde dejó entrever su proceso personal y su deseo de reencontrarse consigo misma. “Ahora voy por la otra mitad de la vida, por el otro 50, y sé muy bien lo que quiero, pero también sé lo que ya no quiero”, expresó con determinación.

Entre otras reflexiones, la conductora profundizó sobre su nueva forma de vivir:
“Ya no digo lo que quiero hacer, lo hago. Ya no busco excusas para avanzar, avanzo aunque me equivoque. Ya no voy donde no quiero estar. Ya no vivo pendiente de lo que dirán los demás. Ya no insisto donde no es o donde no hay con quién. Ya no me quedo sentada si quiero bailar, bailo. Ya no dejo para después de la vida. Ya no digo que me quiero cuidar. Me cuido y listo. Ya no abandono por miedo, voy al frente”.

El discurso, sincero y poderoso, reflejó no solo una ruptura amorosa, sino también un momento de renacimiento personal. Borghi eligió transitar esta etapa rodeada de afectos, con convicción y foco en su bienestar.

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