Un clásico que cambió de conductor
El nuevo conductor de "La Biblia y el calefón" habló tras el debut y nombro algunos de los invitados que le gustaría tener: Sebastián Wainraich no se anda con chiquitas y lo quiere a Barack Obama. Enterate los detalles en DiarioVeloz.com.
Sebastián Wainrainch tuvo un pobre debut con el nuevo ciclo de "La Biblia y el Calefón", una idea de Jorge Guinzburg, producido por Andrea Stivel (viuda de Guinzburg), pero los bajos números no desanimaron al "pelado".
"Ya pasó, estoy contento. Ahora hay que establecer algunas cosas, mejorar otras", dijo Wainraich, apenas terminó el primer programa.
A cerca del desafío que implicó sentarse en el sillón que le perteneció a Guinzburg contó: "Me sentí cómodo, la propuesta llegó a principio de año en realidad. Me gustó, mi instinto me dijo que sí desde el primer momento, aunque esto no indica que no tuviera ni miedo, ni incertidumbre, era todo superado por las ganas y el entusiasmo".
Por otro lado, el conductor contó que hay algunos invitados que le gustaría tener en el piso: "a Barack Obama, para mí es fácil. Sino a Peto Menahem que es un amigo".