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Seis razones para "bancar" a las parrillas de barrio

Frente al aumento de la carne, las pequeñas parrillas siguen siendo la mejor opción.

En los últimos días mucho se habló de la carne: si sube su precio, si baja. Y si de carne hablamos, inmediatamente pensamos en asado. Por eso hoy, queremos reivindicar a las parrillitas de barrio, esas donde a buen precio, se puede comer buena carne y en cantidad.

Son pequeños reductos, muchas veces escondidos e imperceptible, ubicados en calles que pasan desapercibida, pero una vez que los descubriste, ¡Eureka! No te vas a querer ir más. 


A continuación, algunos motivos por los que reivindicamos las "parrillas de barrio":

  • Son económicas: por ejemplo, un sandwich de bondiola o vacío puede costar 30 pesos, unas papas 20 y una gaseosa otros 20. O sea que dos personas pueden comer con 100 pesos.
  • Abundancia: son económicas, pero las porciones, más que suculentas. Llenan y no hay necesidad de pedir más porciones.
  • Buena mercadería: barato sí, malo no. Tal vez sea por el hecho de ser lugares chicos, que tienen la necesidad de cuidar a sus clientes, pero todos los productos son de buena calidad, siempre teniendo en cuenta la relación "precio - calidad". No son carne de kobe, pero nada mal para su precio.
  • Comodidad e inmediatez: no hay que reservar, no hay que esperar y la atención suele ser la justa, ni más ni menos. Fuera del circuito gastronómico, las parrillas de barrio son espontáneas, simples y se ajustan al momento.
  • El "chimi": tal vez sea porque está hecho desde hace mucho tiempo, o simplemente porque está bien hecho, pero el chimichurri y la salsa criolla de éstos "bolichitos" no tiene desperdicio.
  • Salida: como se trata de lugares baratos, donde se come bien y en cantidad, siempre están llenos de gente, algo similar a lo que ocurre con los puestos de bondiola de la Costanera. Esto garantiza mercadería siempre fresca.

Una de las principales contras de estos lugares muchas veces suele ser su aspecto. Claro, no se trata de lugares lindos, decorados al mejor estilo Palermo Hollywood donde los mozos y los chefs son como modelos publicitarios, las mesas no son de lo más cómodas y el lugar tal vez no parezca demasiado limpio. Pero,  como dice el dicho, "ojos que no ven...".

Así que sacate los prejuicios y animate a disfrutar de las parrillas de tu barrio.

Contanos, ¿hay parrillas de este tipo en tu barrio? ¿qué es lo que más y lo que menos te gusta de éstos lugares?