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Nada nuevos: los mensajes de texto cumplen 20 años

Se cumplen 20 años del primer SMS de la historia, una de las formas más usadas para comunicarnos. Se mandan 15 millones por minuto de nuestros celulares.

El primer mensaje de texto se mandó hace 20 años. El iniciador en darle uso fue Neil Papworth, un programador de software de Inglaterra, el 3 de diciembre de 1992, cuando decidió no levantar el teléfono para desearle felices fiestas a un amigo.

"Como los celulares aún no tenían tableros, escribí el mensaje "Feliz Navidad" en una PC y se lo mandé a Richard Jarvis, que en ese momento se encontraba en la fiesta de Navidad de la oficina", expresó Papworth. Así, el primer mensaje de texto del mundo fue enviado, comenzando, sin saberlo, una exitosa y renovada etapa en las comunicaciones masivas.


Esta forma de comunicación fue la antecesora de programas masivos actuales como el Whatsapp, Twitter, y antes Facebook. El año pasado se mandaron 8 billones en el mundo. Unos 15 millones salen cada minuto de nuestros celulares. Y en Argentina crecen día a día.

El saludo navideño de Papworth dio el puntapié inicial. Tuvieron que pasar algunos años hasta el despegue de los mensajes de texto y el posterior surgimiento del "nuevo estilo lingüístico" que abrevia palabras, que ahora todo el mundo entiende: actualmente se puede decir que hay una generación experta en SMS.

Según un estudio de la firma Acision, ya son la forma más popular de mensaje, a pesar de la competencia del e-mail y los servicios de mensajes de las redes sociales: un 92% de los usuarios de teléfonos inteligentes sigue prefiriendo el mensaje de texto. Los jóvenes de entre dieciocho y veinticinco años son los que más mensajes de texto envían –un promedio de 133 mensajes por semana–, según el estudio.

Tipear y mandar un mensaje electrónico breve entre dos o más celulares a través de una red telefónica es ahora uno de los principales medios de comunicación del mundo. El mensaje de texto es el segundo uso más habitual del teléfono, mientras que el primero es consultar la hora.