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La abuela de las gemelas argentinas que cayeron de un edificio en Barcelona aseguró: “Sufrieron bullying en el colegio”

La mujer fue entrevistada por un canal local y denunció que la escuela "no hizo nada" para solucionar el hostigamiento que recibían las nenas. En las próximas horas viajará a España para asistir al funeral de una de sus nietas. 


Continúa la conmoción en la localidad de Sallent, al norte de Barcelona, tras el sigue bajo conmoción después del trágico episodio en el que una nena argentina de 12 años murió y su hermana gemela resultó gravemente herida, después de que ambas cayeran del tercer piso del edificio en el que vivían. Si bien la Policía y la Justicia locales todavía no descartan ninguna hipótesis, con el correr de la horas se conocieron detalles del entorno de las menores que podrían explicar qué se esconde detrás del hecho.

Uno de ellos fue brindado por la abuela de ambas niñas quien, en diálogo con un canal de televisión español, aseguró que sus nietas eran víctimas de acoso escolar y que el colegio al que concurrían “no hizo nada” para contrarrestar el problema.

Desde Argentina, y próxima a viajar a España para acompañar a su familia, la mujer le dijo al canal Telecinco que las niñas comenzaron a sufrir bullying mientras cursaban la Primaria el año pasado debido a su nacionalidad y al lógico acento en su forma de hablar. “Los padres hablaron con el colegio, pero no se hizo nada”, precisó la mujer. Además, dijo que cuando las niñas pasaron al secundario siguieron con problemas en clase.

De acuerdo con lo que trascendió, ambas estaban cursando el primero año en el Instituto Llobregat de Sallent. Su familia se había instalado en la localidad hacía un año y medio. “Estamos consternados, es una desgracia todo esto. Casi no he podido hablar con mi hija (la madre de las hermanas gemelas) porque está en shock”, aseguró la abuela.

Según confirmaron ayer a Infobae desde el área de Comunicación de los Mossos d’Esquadra -la policía de Cataluña-, “no existen indicios de criminalidad en la precipitación”. Es decir que las menores habrían saltado de manera voluntaria. Sin embargo, aclararon que todavía “hay una investigación abierta en la que no se descarta ninguna hipótesis sobre la motivación” de la tragedia. La misma postura acerca de lo que pudo haber ocurrido se mantiene hasta el día de hoy, de acuerdo con lo que dijeron a este medio.

Todo ocurrió cerca de las tres de la tarde del martes en un edificio situado en la calle de l’Estació. Según los medios españoles, la hipótesis más firme hasta ahora (un suicidio) se basa en el hallazgo de dos cartas escritas por las menores y dos sillas que habrían podido utilizar para saltar. Fuentes cercanas a la investigación dijeron a medios españoles que la Policía ahora analiza los dos textos manuscritos.

Por el hecho, una de las menores, identificada como Alana, murió en el acto, mientras que su gemela, L., tuvo que ser trasladada muy grave, en helicóptero, hasta el hospital Parc Taulí de Sabadell, donde sigue en estado crítico pero estable. Según dijo la abuela, la chica que sobrevivió será operada este viernes, pero aclaró que “seguramente haya más operaciones” debido a las heridas que le ocasionó la caída. Según trascendió, tiene algunos huesos rotos y están realizándoles estudios para ver si tienen coágulos en la cabeza.

La versión del bullying “por ser argentinas” no fue únicamente algo que la abuela de las chicas aseguró. Uno de los primeros en mencionarlo fue un primo de las chicas que aseguró en diálogo con la prensa española que las nenas “tenían depresión” y que “iban a empezar a ir al psicólogo” por el acoso escolar que padecían.

El centro educativo, sin embargo, aseguró que no constan expedientes por bullying. Pese a esto -informó el canal de televisión- la Conselleria de Educación abrió una investigación en este sentido. Las versiones contrapuestas por la supuesta falta de asistencia se hicieron notar. Fuentes de la Conselleria citadas por la agencia Europa Press, aseguraron que las jóvenes estaban siendo atendidas y recibían seguimiento por parte de los servicios sociales del Ayuntamiento de Sallent.

“Los Servicios Territoriales de Educación y el centro educativo no contemplan en estos momentos la hipótesis del bullying a partir de la información recogida en las últimas horas”, dijo un comunicado de las autoridades educativas locales, quienes también remarcaron que “tanto el centro educativo, como la red asistencial pública, incluido el Ayuntamiento de Sallent, habían activado todos los recursos disponibles a nivel de apoyo social, educativo y psicológico para atender a las menores y la familia”, expresaron. “El trabajo en red estaba activado y seguía su procedimiento de atención habitual a pesar de las dificultades que pueden surgir en un proceso de este tipo”, finalizaron.

El alcalde de Sallent, Oriol Ribalta, también confirmó que las nenas recibían atención psicológica en el instituto Llobregat. “No sabemos si el padre trabajaba; pero la madre sí”, comentó el jefe municipal. Se investiga también la situación familiar, que al parecer, estaba marcada por problemas psicológicos.

Otro de los detalles que son materia de investigación, de acuerdo a los medios españoles, es que al parecer Alana también era insultada por su deseo de tener un nombre masculino. Según medios como ABC o El País, la nena se hacía llamara Iván y manifestó su anhelo por cambiarse se sexo. De hecho, sostienen que el acoso se intensificó después de la chica se cortó el pelo en el último tiempo. “Se reían de ellas por su acento y la identidad sexual de Alana», dijo B., un alumno citado por ABC.

Las fuentes de los Mossos consultadas por Infobae confirmaron que los padres de la gemela brindaron una declaración a las autoridades. Sin embargo, el contenido de sus dichos -indicaron- “forma parte de la investigación” y no podrán dar detalles al respecto porque la causa está bajo secreto de sumario. “Se trata de un caso de menores plenamente identificadas, con lo que esto conlleva”, aclararon. El caso es investigado, además, por el Juzgado de Instrucción número 5 de Manresa.

Luego de la conmoción que causó el hecho, las autoridades celebraron un minuto de silencio frente al Ayuntamiento y decretaron tres días de duelo.

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