Guitarras extravagantes
Casi cualquier cosa se puede usar para construir una guitarra. Así lo demuestran las obras de dos luthiers.
Rastrillos, sartenes viejas y cornamentas de alces pueden parecer basura para algunos, pero no para el canadiense Lorne Collie, que ha transformado todas estas cosas en guitarras.
Collie es un creador de guitarras, y su hobby consiste en que cualquier cachivache que anda rondando por ahí se convierta, gracias a su talento, en una guitarra. "La primera guitarra que fabriqué estaba hecha con una pala", dice el ex maquinista de 73 años, que vive en Hilbre, Manitoba, Canadá.
El luthier canadiense recibe regularmente ofertas de fanáticos de las guitarras para comprar instrumentos excéntricos, pero él dice que sus obras no están a la venta. "No quiero entrar en ésa de hacer cosas para venderlas", dice. "Estoy retirado, ahora", confiesa. Sólo lo hace por placer.
Aunque hay excepciones. Una de ellas es si un beatle le llegara a pedir una. "Paul McCartney es un tipo al que no me importaría venderle una guitarra". No se sabe si es porque admira a Los Beatles, o porque al bajista le cobraría una fortuna.
Otro exponente del arte de construir guitarras excéntricas es el holandés Yuri Landman, a quien lo apasiona fabricar guitarras "esotéricas". Hizo su primera guitarra con la pata de una mesa y ahora construye guitarras que tienen de 3 a 18 cuerdas.
Collie es un creador de guitarras, y su hobby consiste en que cualquier cachivache que anda rondando por ahí se convierta, gracias a su talento, en una guitarra. "La primera guitarra que fabriqué estaba hecha con una pala", dice el ex maquinista de 73 años, que vive en Hilbre, Manitoba, Canadá.
El luthier canadiense recibe regularmente ofertas de fanáticos de las guitarras para comprar instrumentos excéntricos, pero él dice que sus obras no están a la venta. "No quiero entrar en ésa de hacer cosas para venderlas", dice. "Estoy retirado, ahora", confiesa. Sólo lo hace por placer.
Aunque hay excepciones. Una de ellas es si un beatle le llegara a pedir una. "Paul McCartney es un tipo al que no me importaría venderle una guitarra". No se sabe si es porque admira a Los Beatles, o porque al bajista le cobraría una fortuna.
Otro exponente del arte de construir guitarras excéntricas es el holandés Yuri Landman, a quien lo apasiona fabricar guitarras "esotéricas". Hizo su primera guitarra con la pata de una mesa y ahora construye guitarras que tienen de 3 a 18 cuerdas.