Esmeralda Mitre: ''Mi mamá siempre vivió como si fuera pobre, eso me salvó''

Esmeralda Mitre, hija de Blanca Isabel Alvarez de Toledo y Bartolomé Mitre, estuvo en 'Chiche en Vivo' y reveló cómo fue su infancia, habló de su riqueza, su rebeldía y sus ganas de ser independiente de su familia.

La actriz, de 31 años, se autodefinió y contó cómo llegó a elegir su profesión ''Yo en realidad soy actriz, algo de mamá habré heredado. Tengo mucho de mamá en el carácter, la formación sobre todo. Admiro mucho su cultura. Yo tengo algo muy parecido a ella, de carácter, de personalidad. Tengo una buena relación con papá''.

Como es lógico y a pesar de que tomó otro camino, asegura que es imposible de separar su vida del periodismo. ''Creo que tengo el periodismo en la sangre, no todos mis hermanos lo tienen, soy como canchera con la prensa, me sé mover, no les tengo miedo. Creo que tengo cintura. Me interesa el periodismo, es fascinante'' y deslizó la posilibidad de sumarse al medio: ''Quizá algún día esté en el diario en el sector cultural, espectáculos. No tengo alma de empleada, tengo cabeza de lider. Quiero hacer cosas para apoyar a la cultura''.

Respecto a su actual pareja, Darío Lopérfido, contó que, ''soy chapada a la antigua, no me pongo de novia de un día para otro. De mi novio dijeron que era gay, y antes de salir tuve que descubrir quién era. A mi me gusta la ambigüedad de los hombres. Voy a tener hijos con él. Pero mas adelante, los hombres tienen que tener hijos después de los 45 y las mujeres de los 36. Uno no puede hacer todo junto. En este momento tengo necesidades de ser yo misma. Ojalá coincidamos en los tiempos. Yo no puedo tener hijos si no los voy a adorar porque entorpecen mi carrera''.

''Mi mamá tuvo 40 vidas en una. Hizo todo junto. Yo tuve una vocación clara. Ella no se animó a ser actriz o artista de una. Dejó todo por su marido. A mi ella me llenó de arte.'' explicó queriendo diferenciarse de su madre.

A pesar de que siempre tuvo definida su vocación relató que, ''me costó mucho ganarme un lugar, mi apellido no me ayudó. Me miran con lupa. Si sabía que iba a ser tan difícil no sé si lo volvería a hacer. Como a mi no me faltaba nada no me elegían.''

Esmeralda es una de las mujeres más ricas de la Argentina, aún así su vida no ha sido como puede creerse. ''La vida es mucho más compleja de lo que la vida puede hablar o pensar. Creo que no tuve una educación de que todo era fácil, mi madre tuvo muchos problemas de dinero en la época del peronismo, por eso mi madre siempre dice que no tiene. Ella lo tiene instalado, ella cree que es pobre. Eso a mi me salvó. Me enseñaron que es mala educación mostrar el dinero. Siempre me hicieron sentir que el dinero se puede perder. Lo que sentía mamá me generó angustia de que perder la plata es algo que podía pasar''.

''Nunca tuve plata de nada. Me rompí la cabeza para ser independiente. El dinero está vulgarizado, el que mas muestra es el que mas poder tiene. Hay que ser elevado para no ser prisionero de su dinero. En mi casa pude aprender que uno no vale por el dinero'', dijo para finalizar.

Aunque ella no quiere estar asociada al dinero ni al estilo de vida de su familia, siempre tendrá el estigma de ser 'hija de'. De todos modos busca ganarse un lugar por su talento, y no por su apellido. Es así, la rebelde de los Mitre.