El robot ecológico que come y defeca
Una empresa inglesa desarrolló un robot autosustentable: para funcionar genera su propio “alimento”, lo metaboliza y luego lo excreta.
Mediante un proceso de conversión energético queda listo para dirigirse al baño. Fue bautizado como Ecobot III y más parecido a un humano, imposible.
Los investigadores del Bristol Robotic Lab inventaron un androide donde nadie interviene para darle energía: tiene un estómago sintético que permite al Ecobot III “comer” una mezcla de desperdicios para crear energía. La máquina usa celdas de combustible biológico para convertir la materia orgánica en átomos de hidrógeno y ser autónomo. Tras alimentarse, “va al baño”.
El sistema permite al Ecobot III ir por su cuenta al sitio donde deglutir el alimento que necesita. Luego metaboliza los materiales y lo transforman a hidrógeno. Estos átomos van hacia un electrodo donde se genera una corriente eléctrica con la que el robot funciona. Cada 24 horas, el Ecobot III dispone los residuos del proceso en una cámara especial de desperdicios.
El Ecobot III sobrevivió una semana sin ayuda, comiendo y bebiendo agua. Dentro de poco, antes de entrar al baño, habrá que asegurarse si no tenemos un Ecobot sentado en el trono.