DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

Desafíos y contrastes

*Por Fernando Micca. No será fácil la gestión que encarará De la Sota, en un contexto que anticipa que en 2012 el Gobierno nacional deberá enfrentar cambios que sugieren ajustes.

El desafío del próximo Gobierno provincial de Córdoba será grande y complicado. La economía nacional ya no es excedentaria como años atrás y la Provincia tiene deudas y compromisos que asustan. La suma de ambas situaciones abre interrogantes, pese a que la actividad privada empuja hacia adelante.

Por lo pronto, desde 2012 la Provincia deberá afrontar vencimientos de deuda por unos 1.500 millones de pesos anuales; además, el 52 por ciento de la deuda está en dólares, lo que puede aumentar los compromisos si se acelera la apreciación del dólar. Si a ello se agrega el abultado déficit de la Caja de Jubilaciones, está claro que Córdoba necesitará un acuerdo con la Nación o al menos una asistencia continua para funcionar.

¿Cuánto puede esperarse de la Nación? Hay gestos y antecedentes que inquietan. Córdoba tiene acreencias por unos 1.100 millones de pesos comprometidos por la Casa Rosada para subsidiar el déficit de la Caja de Jubilaciones de la Provincia, de los cuales la Nación aún no remitió un peso, además del financiamiento de obras viales y viviendas. La última respuesta del Gobierno federal sobre los fondos para la Caja no fue precisamente alentadora.

Esto no es sólo una cuestión de voluntad política. Los fondos que maneja la presidenta Cristina Fernández ya no son los mismos que eran antes. El superávit fiscal –que junto con el comercial el oficialismo exhibía con orgullo– trocó en déficit si se incluyen los pagos de intereses de la deuda. Y el festival de subsidios hace disminuir los recursos para otros menesteres. Porteños y bonaerenses del conurbano –no necesariamente pobres– pagan migajas por la luz y el gas que consumen, así como el transporte es más barato; sólo esos subsidios le costarán al Presupuesto nacional alrededor de 25 mil millones de pesos este año. Si hay menos caja, no será sencillo para las provincias recibir apoyo; ni siquiera el ya comprometido.

Para adelante. La otra cara de la moneda es el impacto de la mayor actividad económica en la órbita privada. En el segundo trimestre de este año, bajó la desocupación en el Gran Córdoba comparada con igual lapso de 2010. El desempleo cayó de 8,4 a 6,6 por ciento y se ubica por debajo del promedio nacional e incluso respecto de la región pampeana. También disminuyó en Río Cuarto, de un preocupante 11,5 a un más moderado 7,5 por ciento.

El crecimiento de la actividad metalmecánica y de la construcción es el motor central de la recuperación económica (hay que prenderle velas a Brasil, principal receptor de las ventas cordobesas al exterior, junto con China), mientras los ingresos por las exportaciones de soja mantienen excelente nivel.

La nueva niña mimada –la industria de alta tecnología– sigue avanzando. Hoy emplea a nueve mil cordobeses y exporta por 700 millones de pesos anuales, lo que multiplica varias veces las estadísticas que exhibía el sector una década atrás.

Un dato más, que vale ponderar: en los últimos tres años, la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) viene aumentando levemente el número de inscriptos y también de egresados, lo que revela más facilidades de la clase media para estudiar. No hace falta aclarar el impacto de las actividades de la UNC en la economía local.

La recuperación de la actividad privada es el gran punto a explotar. Por lo demás, no será fácil la gestión que encarará el gobernador electo, José Manuel de la Sota, en un contexto que sugiere que en 2012 el Gobierno nacional deberá encarar cambios que sugieren ajustes. Aunque el oficialismo no lo diga.