Comenzó el juicio por la Causa Cuadernos

Este jueves se puso en marcha el juicio oral por la llamada Causa Cuadernos, considerada una de las investigaciones de corrupción más importantes de la historia argentina. El proceso, que se desarrollará en etapas y podría prolongarse varios años, estará a cargo del Tribunal Oral Federal N°7.

Entre los más de 70 acusados que comenzarán a ser juzgados figuran la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, el exministro de Planificación Julio De Vido, el exsecretario de Obras Públicas José López, el chofer Oscar Centeno y el exsubsecretario Roberto Baratta.

El caso se originó a partir de las anotaciones de Centeno, quien registró con detalle presuntos pagos ilegales entre empresarios de la obra pública y funcionarios durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. La investigación, iniciada en 2018 por el fiscal Carlos Stornelli y el juez Claudio Bonadio, expuso un supuesto sistema de recaudación ilegal que habría involucrado miles de millones de dólares en sobornos a cambio de contratos estatales.

Según la acusación, los fondos eran entregados en distintas locaciones, entre ellas las residencias de los Kirchner en Buenos Aires y Olivos, así como en la Casa Rosada. Parte del dinero habría sido redistribuido entre otros funcionarios.

Por la gran cantidad de imputados y testigos, el juicio se realizará de forma virtual. En principio, las audiencias se celebrarán los jueves a las 9:30 y se transmitirán por YouTube. El cronograma será revisado luego de la feria judicial para evaluar si es posible acelerar el proceso.

Cristina Kirchner llega al juicio señalada como jefa de la asociación ilícita y acusada de recibir dinero a través de intermediarios. De Vido, en tanto, es apuntado como organizador del esquema de sobornos y Baratta como el encargado de la recaudación. Centeno fue uno de los primeros arrepentidos y su testimonio es clave para la fiscalía.

Entre los empresarios que admitieron haber pagado coimas figuran Ángelo Calcaterra, primo de Mauricio Macri, Aldo Roggio, Carlos Wagner, Hugo Eurnekian, Enrique Pescarmona y Gerardo Ferreyra, entre otros. Sus declaraciones permitieron reconstruir parte del circuito de corrupción que abarcó licitaciones, represas, concesiones y subsidios.

El tribunal rechazó los intentos de algunos imputados de cerrar la causa mediante acuerdos económicos. Tanto la fiscal Fabiana León como la Unidad de Información Financiera (UIF) sostuvieron que la magnitud del caso impide aplicar una reparación económica para evitar el juicio.

Uno de los puntos clave del expediente es la autenticidad de los cuadernos de Centeno. Un peritaje de Gendarmería realizado este año confirmó que los manuscritos y sus copias digitales pertenecen al chofer y fueron elaborados en distintos momentos. Solo falta el cuaderno número 5, que no fue hallado. Los peritos concluyeron que los textos fueron escritos de manera “libre y espontánea”, respaldando su validez como prueba.

En total, la fiscalía imputó a 126 personas bajo ocho tipos de delitos, entre ellos asociación ilícita, cohecho y encubrimiento. A Cristina Kirchner se le atribuye el rol de jefa de la organización y coautora en decenas de hechos de cohecho pasivo. En la causa principal se investigan 93 episodios y se citaron 299 testigos, aunque en total podrían participar casi 900.

Las penas por asociación ilícita van de tres a diez años de prisión, con un mínimo de cinco para los líderes. El equipo de fiscales estará integrado por Fabiana León, Nicolás Codromaz, Guido Ambrosio y Claudio Nimis.

El inicio del juicio marca un nuevo capítulo en un caso que sacudió al país y que, según los investigadores, expuso el funcionamiento de una estructura de corrupción entre el poder político y el empresariado durante más de una década.