Así serán las vacaciones de los empleados según el proyecto de reforma laboral que propone el Gobierno
La propuesta promueve modificaciones en el régimen de licencia paga, introduce condiciones para dividir el descanso y establece formalidades sobre los avisos a los trabajadores.
La reforma laboral que impulsa el Gobierno de Javier Milei —basada en el proyecto presentado por la diputada Romina Diez— propone cambios significativos en el régimen de vacaciones para los trabajadores en relación de dependencia. El texto, que ya fue enviado al Congreso para su debate, introduce mayor flexibilidad en la organización del descanso anual y modifica aspectos centrales del artículo 154 de la Ley de Contrato de Trabajo N° 20.744.
El proyecto establece que el empleador podrá otorgar las vacaciones en cualquier momento del año, hasta el 30 de abril del año siguiente. Esto amplía el margen temporal para el uso de la licencia paga y elimina las restricciones estacionales que regían hasta ahora.
Una de las principales novedades es la posibilidad de dividir el período vacacional, siempre que cada parte no sea menor a una semana completa. De esta forma, los trabajadores podrán distribuir sus días de descanso en distintos momentos del año, adaptándose mejor a las necesidades personales o familiares, y las empresas podrán planificar con más flexibilidad.
El empleador deberá notificar por escrito la fecha de inicio de las vacaciones con al menos 21 días de anticipación. El aviso deberá detallar el período asignado y servirá para que los trabajadores puedan organizar con tiempo sus compromisos personales.
Otro punto clave es que el empleador deberá asegurar que cada trabajador pueda tomar sus vacaciones en verano al menos una vez cada dos años, salvo que el propio empleado elija otro momento del año. Este requisito busca preservar el derecho a disfrutar del descanso durante la temporada más demandada.
Cuando dos trabajadores estén unidos por matrimonio o vínculo familiar y trabajen en la misma empresa, podrán solicitar vacaciones en el mismo período. Si ambos lo piden, el empleador estará obligado a concederlo. Esta disposición apunta a facilitar la organización familiar y mantener la continuidad del descanso conjunto.
El proyecto deja abierta la posibilidad de que los convenios colectivos establezcan condiciones diferentes, siempre que se adapten a la realidad de cada sector. Esto permitirá que las ramas de actividad con demandas estacionales u operativas específicas ajusten el régimen de licencias según sus necesidades.
La iniciativa busca adaptar la legislación laboral a las nuevas dinámicas del trabajo, combinando mayor flexibilidad organizativa con el mantenimiento de garantías básicas. La posibilidad de fraccionar las vacaciones, el aviso anticipado y el derecho al descanso estival configuran un esquema más moderno, que intenta equilibrar las necesidades productivas de las empresas con el bienestar de los empleados.
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