Wanda Nara y su abogado deberían estar presos

Después de más de seis meses de enfrentamientos judiciales con Wanda Nara por la tutela de sus hijas, el futbolista consiguió que el juez autorice que sus hijas se trasladen a su casa durante siete días e, incluso, que puedan pasar tiempo con su novia, ‘la China’ Suárez.

Pero la contienda, con la pésimamente asesorada Wanda, promete nuevos enfrentamientos. El tan ansiado reencuentro del padre con las hijas tenía todas las chances de convertirse en un viernes en familia; la situación se torció cuando la madre se negó a entregar a las niñas, la policía se presentó en el domicilio y la paciencia del juez llegó a su límite. La participación policial tuvo un objetivo: entregar la intimación del juez a la madre, en la que la intimaba a entregar a las nenas a su padre y a dejar que la situación se tranquilice de una vez por todas. Fuentes del Ministerio Tutelar me contaron lo que debieron luchar en la casa de Wanda y que, después de 12 horas intensas de espera y tras muchas charlas, lograron que la madre cediera, no sin antes advertirle que podía ser detenida. Intervino la jefa de Violencia Familiar y de Género de la policía porteña. Ella fue la encargada de convencer a Wanda de que tenía que entregar a las nenas y que se vayan con su padre, con las valijitas con ropa.

La preocupación de la madre es tanta que el sábado por la mañana se va a Miami, como tenía planeado, porque va a participar del Mundial de Clubes. Si estuviera tan preocupada, como anuncia en redes sociales, por las hijas, por lo que van a hacer Mauro y la China, debería quedarse por si las chicas quieren volver a su casa.

Pero lo cierto es que ambos padres dirimen sus diferencias en redes sociales y medios de comunicación, que encontraron un tema de mucho interés, que no hace más que evidenciar que hay adultos que no están —ni estarán— preparados para ser padres, cosa muy frecuente, por cierto. Y si a esto le sumamos la intervención de abogados de muy baja moral y mucha menos honestidad intelectual, la cuestión escalará a límites inimaginables.

A modo de ejemplo va esto: Mauro Icardi festejó la resolución judicial como si hubiera convertido el gol de su vida, y uno de los abogados de Wanda Nara le contestó textualmente en X: “Y claro, ¿qué puede decir un monito que solo supo patear una pelota en toda su vida? Tal vez, si hubiese empezado la escuela, tendría mejor capacidad de comprensión”, escribió el Dr. López desde su cuenta, donde replicó la noticia en la que Icardi apuntaba contra él. Acto seguido, el deportista le hizo captura y decidió subirlo a su Instagram, donde agregó: “Epa, epa, ¿anda nervioso el peladín? No solo empecé la escuela, terminé la primaria, la secundaria y estuve a punto de empezar una carrera universitaria, pero la vida y mis dotes con la pelotita tenían algo mejor preparado para mi futuro… Trabajar y ganar mi dinero honradamente, que dudo que sepas lo que significa”.

“Recordemos que sos el monito de Payarola, el que agrede a un nene de 4 años; el que es socio y cómplice de estafas a ancianos, de extorsionar a un chico, de robarle a un colega que también patea la pelotita. Pero cuando creía que no podía ser peor, nos encontramos con que decís ser abogado y ejerces sin matrícula”, continuó, y le lanzó una indirecta a Wanda Nara sobre los letrados que la representan: “¿Andás nervioso porque se les están cayendo las caretas uno a uno? Confié en la Justicia desde el primer momento, y confío en que gente lacra y basura como ustedes termine tras las rejas. Sí, señores, esta gente representa a mis hijas. ¡Qué vergüenza!”.

Todo lo que dice Icardi es cierto; esos abogados representan a la madre y a las nenas. Tal vez sería momento de que el Tribunal de Ética del Colegio de Abogados intervenga y haga observar a los profesionales el Código de Ética que rige la actividad de los abogados. Los padres necesitan urgente atención psicológica y las niñas, otro tanto.

Desconozco si Wanda Nara conoce el historial de sus abogados o si tal vez tendrán intereses concurrentes en toda esta triste parodia de familia disfuncional, y que los gastos los pague la jugosa billetera de Mauro Icardi. Triste final de una pareja de famosos que usan a sus hijos como trofeo para ver quién la tiene más larga… Wanda y sus abogados merecerían la prisión.