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Una panadera se defendió a cuchillazos de un ladrón armado

Ocurrió en Córdoba. El delincuente ya le había robado un día antes. Regresó y la dueña del comercio lo estaba esperando. El violento robo quedó registrado por las cámaras de seguridad del local. 


El domingo pasado, un delicuente ingresó a una panadería con el casco puesto, amenazó a la empleada y le exigió el dinero de la caja. 

Al día siguiente, el mismo delincuente regresó, pero esta vez estaba armado. En esta oportunidad se encontró con la dueña, quien cansada de los hechos de inseguridad, se negó a entregarle la recaudación y sus pertenencias. Sin embargo, el ladrón traspasó el mostrador y en ese instante comenzó un violento forcejeo. La dueña seguía con el cuchillo firme en su mano y gritaba desesperada pidiendo auxilio. Eran alrededor de las 20 y faltaba poco para el cierre del comercio. Las cámaras de seguridad registraron el hecho. 

 
 
 
 
 
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En diálogo con Arriba Córdoba, la propietaria aseguró que sintió impotencia: “No lo pude controlar. Quise hacerme a un lado, pero la emoción me llevó”. Reconoció que “no fue lo más razonable”, ya que expuso su vida al peligro, pero sostuvo que “fue el instinto”.

“Uno se cansa de trabajar todos los días para los chicos, para uno, para todo el mundo y que te quieran sacar lo poco que tenés. Me cuesta un montón mantener la panadería, entonces los impulsos me llevaron a eso”, lamentó la víctima. 

Seguían trenzados en lucha hasta que ella logró sacarlo del local. En ese momento apareció otra persona, quien la defendió: “Alguien me ayudó, lo golpeó en la calle”. Finalmente, el delincuente escapó. 

“Yo intentaba retenerlo, no es que quería golpearlo. Quería agarrarlo para darle tiempo a la Policía”, confesó la mujer quien aún está en shock por lo ocurrido. Aseguró que no pudo ver los videos y camina por la calle con mucha desconfianza.

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