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Un grupo de comerciantes desnudó y linchó a una mujer acusada de robar

Ocurrió en San Miguel de Tucumán. Es el tercer linchamiento que ocurre en la provincia a lo largo del último mes.

La golpearon, la desnudaron y la amenazaron con prenderla fuego en plena vía pública. Fue como represalia a un supuesto intento de robo. En Tucumán, un grupo de mujeres comerciantes atacó brutalmente a la aparente ladrona desoyendo sus desgarradores pedidos de auxilio. Es el tercer linchamiento que ocurre en la provincia en el último mes.

El hecho ocurrió el pasado miércoles en la intersección de las calles Crisóstomo Álvarez y Sáenz Peña, en el barrio El Bajo de San Miguel de Tucumán. Alrededor de las dos de la tarde un grupo de personas señalaron a una mujer como la artífice de varios robos a locales de la zona y comenzaron a agredirla salvajemente con golpes de puño. Ya en el piso, mientras la “mechera” clamaba por presencia policial, dos mujeres que serían víctimas de robo la atacaron -una de ellas con arma blanca- y la amenazaron.

Las imágenes más sensibles del momento fueron captadas por un transeúnte que grabó parte de la secuencia desde el interior de una galería comercial. En el video que se viralizó en redes sociales se ve como al final del linchamiento intervienen estas mujeres para hacer “justicia por mano propia”. “¿Por qué me andás choreando a mí?”, le recrimina una de ellas mientras la golpea. Por su parte la otra le arranca la remera; lo hace con una tijera con la cual la continua amenazando y le corta el pantalón. También le dicen que la van a “quemar”. Semidesnuda, la mechera continúa pidiendo ayuda con vehemencia ante la mirada de personas que presenciaron el hecho y transitan por el centro tucumano. “¡Quedate quieta!, ¡Quedate quieta”, le ordenan mientras la arrastran por la vereda. En ese momento el registro fílmico se interrumpe.

Según informaron medios locales, la agresión culminó cuando dos efectivos de la Guardia Urbana acudieron al lugar e intervinieron al ver que la mujer corría semidesnuda mientras era perseguida por una turba enfurecida. Una comerciante de la zona no realizó la denuncia formal, pero aseguró que la sospechosa había intentado robarle unas prendas el día anterior.

Finalmente la víctima del linchamiento fue trasladada a la Comisaría 1°. A las horas la Justicia ordenó su libertad ya que no había denuncia formal, y encomendó realizar un relevamiento y peritaje en el lugar de los hechos, además de buscar identificar a quienes fueron partícipes de la brutal golpiza.

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