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LA POLÉMICA DEL DÍA: los rústicos dominan nuestro fútbol

16 goles en 8 partidos, 30 amonestados, 6 expulsados y pocas llegadas de gol resumen el pobre fútbol que se vio en la segunda jornada del Clausura argentino. ¿Te gustó cómo se jugó?

Por Mariano Bertotto
(
mbertotto@diarioveloz.com)

Si bien vale excusarse por las ausencias de habilidosos como Juan Román Riquelme, Juan Sebastián Verón, Gastón Fernández, Walter Erviti, Juan Mercier, Giovanni Moreno y Patricio Toranzo, entre otros, es palmario el declive que está sufriendo el fútbol argentino.

Al poco de completarse la segunda fecha, nuevamente predominó la fricción, el roce y la rusticidad, antes que la habilidad, la gambeta, la pisada y el buen juego. Los exiguos 16 goles en ocho partidos, sumando los 30 amonestados y 6 expulsados, son un reflejo a lo mencionado, y pocos partidos no causaron dolor de ojo.

En esta segunda fecha, un nuevo Martín Rolle, un habilidoso Sebastián Grazzini y un "experimentado" Mouche fueron los destacados, sin olvidarse de la actitud goleadora del interminable Esteban Fuertes. Pero hasta ahí llegamos. Un tiempo bien jugado de Gimnasia, otro de All Boys (sin Barrientos), un rato de River, otro de Racing y listo. Sólo eso se pudo apreciar en nuestro gran Torneo, ubicado séptimo en el mundo.

Cabe recalcar una propuesta futbolística que compendia mí pensamiento. El actual campeón, Estudiantes, visitó al último del Clausura, Quilmes, con un solo punta (4-5-1), algo que desde mi perspectiva no puedo creer. Imagínese si Barcelona viaja al Málaga y deja a Villa como único delantero, jugando con cuatro defensores y cinco volantes. O bien sino al Manchester United midiéndose contra Wolverhampton sin Rooney ni Chicharito Hernández. Bueno, eso pasa acá. Por eso quiero quedarme con ese partido.

Obviamente prefiero dejar en el olvido al Argentinos-Independiente (dos equipos que nos representan en la Copa Libertadores) y no se puede pasar por alto el chato Racing-Boca, aunque se justifica por la ausencia de los pocos jugadores de clase que nos quedan: "Gio", Riquelme, Toranzo y Erviti. Y por supuesto recordar con nostalgia a aquel Vélez que se preocupaba más por atacar que por defender, que ahora se contagia del resto y se dedica a "cuidar el cero".

Pasan las fechas y la pobreza del fútbol se dilata siendo un reflejo de la sociedad, pero desde DiarioVeloz.com, que pregonamos el fútbol vistoso, continuamos con la esperanza de inculcar nuestro pensamiento.