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La Ciudad negocia para que las prepagas vacunen contra el Covid-19

La idea del Gobierno porteño es evitar que se generen cuellos de botella en la campaña de vacunación contra el virus.

En medio de la organización de las campañas de vacunación contra el Coronavirus, el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires busca que las 60 empresas de salud prepagas y obras sociales vacunen contra el virus para así evitar que se produzca un cuello de botella en el sector público por la demanda. En tanto, en la Provincia no involucran prestadores privados, aunque no descartan sumarlos más adelante.

La ciudad busca que la "población de riesgo”, quienes serán los primeros en darse la vacuna, puedan elegir darsela en los vacunatorios públicos o con su prestador privado, si lo tienen. "La idea es ser elásticos en esto”, explicó a Clarín Gabriel Battistella, subsecretario porteño de Atención Primaria, Ambulatoria y Comunitaria.

La información que brindó el funcionario de la Ciudad, es distinta a lo que había adelantado el ministro de Salud, Ginés González García, sobre que la vacunación se haría en las escuelas y por padrón electoral. Según Clarín, esta semana una fuente nacional adelantó que "cada jurisdicción definirá su estrategia”, y que se realizan reuniones con cada provincia para definir como será la vacunación.

En cuanto a los 5 millones de afiliados del PAMI, si residen en CABA y además están dentro del 28% de los porteños afiliados a una prepaga, se podrán vacunar donde disponga la empresa. El resto deberá acudir a los vacunatorios o “postas” que disponga el Ministerio de Salud porteño. Battistella adelantó que harán convocatorias para la vacunación, como con cualquier otra campaña: “Por ejemplo, el día uno, los de equis grupo, cuyo DNI termina en 0 y 1. El día dos, los que terminan en 2 y en 3...”

El funcionario además adelantó que pondrán especial esfuerzo en la carga de datos, luego de los problemas que se suscitaron con las demoras en las cargas de fallecidos locales. El sistema que se utilizará se llama NOMIVAC o Registro Federal de Vacunación Nominalizado. Cada persona vacunada deberá ser "cargada" en ese sistema, sea la provincia que sea.

“Habrá un empadronamiento de la persona. Tenemos la historia clínica digitalizada y tenemos que ser cuidados y saber a qué persona, con un grado de seguridad muy alto, le dimos la vacuna. Se requiere un flujo de información con niveles de precisión muy altos, ya que los datos se elevan a Nación”, detalló.

Battistella dijo que “se espera que a CABA llegue el 10% de las vacunas que vayan arribando al país”. Si llegan, como dijo el presidente Alberto Fernández, 300.000 dosis de la vacuna rusa Sputnik V antes de fin de año, significa que, en una primera instancia, la Ciudad dispondría de dosis para 30.000.

Desde el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, explicaron que “por ahora no hay acuerdos" con el sistema privado. Allí se repartirán 120.000 vacunas (240.000 dosis) de las 300.000. Vale recordar que la población bonaerense representa el 40% del país.

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