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Increíble: quería fotografiar a una osa polar, pero el animal lo atacó y casi se lo come

Un fotógrafo soportó 45 minutos el ataque de un oso hembra hambriento que quería alimentar a sus cachorros. ¡Mirá el video!

El fotógrafo, llamado Gordon Buchanan, dijo que estuvo más asustado que nunca en su vida y el micrófono recogió el ruido de su corazón acelerado. Es que el valiente hombre se encontró cara a cara con un gran oso polar de más de 450 kilos, que estaba en busca de su próxima comida.

El hambriento depredador de dos metros atacó repetidamente la caja de plexiglás -el equivalente en el hielo de una jaula de tiburones- donde estaba se encontraba Buchanan.

En el video, Buchanan muestra una gran actitud, mientras el oso polar busca atacarlo, durante 40 minutos. La osa, con sus poderosas garras y gigantes dientes, trató de hacerse con él para poder alimentarse y alimentar a sus dos cachorros.


Buchanan, quien ha filmado las criaturas más mortíferas del mundo durante 20 años, describió el calvario como "la más terrorífica experiencia de mi vida". Agregó: "Mucha gente piensa que los carnívoros son intrínsecamente peligrosos, pero la mayoría no lo son. Hay un riesgo mínimo y los ataques son la excepción. Pero los osos polares son diferentes, sin lugar a dudas que me quería para el almuerzo. Ella era tan persistente, buscando un punto débil por casi 45 minutos".
Despues de lo vivido, también relató: "Yo estaba aterrorizado y se podían oír mis latidos en el micrófono. Realmente fue un momento sensacional y una situación preocupante. Esto muestra cuán enormes y poderosos son. Es la cosa más difícil que he hecho y la más temible. No me han aterrorizado antes durante 40 minutos".

Buchanan siguió a la madre Lyra y a sus cachorros Miki y Luca durante 12 meses para acercarse a una familia de osos polares más que nadie lo hubiera hecho antes. Arriesgó su vida en largos viajes por encima y a través del hielo, a menudo en un territorio desconocido, luchando contra vientos helados, violentas tormentas y las temperaturas cayendo en picado.

En varias ocasiones, el equipo tuvo que huir en sus motos de nieve cuando los depredadores gigantes se acercaron demasiado. Por suerte, salió con vida y puede contar la historia.