Incidentes en Avellaneda: el fiscal exige un acuerdo entre Independiente y Aprevide para reabrir el estadio 

Tras los graves incidentes ocurridos en el partido entre Independiente y Universidad de Chile por la Copa Sudamericana, la Justicia bonaerense ratificó la clausura del estadio de Avellaneda. El fiscal a cargo de la causa, Mariano Zitto, aseguró que el escenario no podrá reabrir hasta que todas las partes involucradas firmen un consenso que garantice condiciones mínimas de seguridad.

Según Zitto, antes de levantar la medida se deberá rubricar un plan integral de prevención que involucre a Aprevide, Independiente, la AFA, el Ministerio de Seguridad bonaerense y, de ser necesario, la Conmebol. El objetivo es evitar que se repitan los errores de coordinación entre la seguridad pública y privada que derivaron en los episodios violentos del último encuentro.

“Una escena de posguerra”

El fiscal fue contundente al describir lo que encontró en la tribuna visitante: “Encontramos todo roto. Arrancaron varillas de construcción. Había sangre por todos lados. Fue una escena de posguerra”, expresó. Además, sostuvo que las imágenes de las cámaras municipales evidenciaron una falta de planificación y coordinación que puso en riesgo tanto a jugadores como a hinchas.

Condiciones para la reapertura

La fiscalía informó que se abrieron 25 causas penales y se pidieron detenciones de hinchas del Rojo por “tentativa de homicidio”. En tanto, los 120 aficionados chilenos que habían sido arrestados no enfrentan cargos penales, aunque se les aplicó el derecho de admisión.

El estadio seguirá clausurado hasta que se definan medidas claras:

• Distribución de responsabilidades entre las fuerzas de seguridad y el club.

• Protocolos específicos para partidos internacionales.

• Coordinación entre organismos provinciales y deportivos.

Aunque no se estableció una fecha de reapertura, el mensaje fue contundente: sin consenso y garantías concretas, la cancha de Independiente permanecerá cerrada.