DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

El Robin Hood argentino: trabaja de "recuperador" de billeteras en el subte

Oscar Territo es un hombre de 54 años desempleado y pasa sus días en los subterráneos recuperando billeteras de los pasajeros que son asaltados por punguistas. Conocé su fantástica historia.

Oscar Territo es un hombre de 54 años que, sin empleo fijo desde hace 10 años, pasa la mayor parte de su tiempo en las estaciones de subte ayudando a los pasajeros que les roban sus billeteras. Conoce al Robin Hood argentino.

No existe nada más molesto que tener que realizar todos los trámites cuando te roban la billetera. Muchos llevan sus tarjetas de crédito y débito, la SUBE, documentos, dinero y eso implica una perdida de tiempo al tener que dar de baja todos los servicios.

¿Cuál es su tarea? Sigue el rastro a los ladrones más comunes de toda ciudad: los punguistas. No es policía, ni tiene como objetivo atrapar al criminal. Su misión es otra: alivianarle los trámites y las pérdidas a las víctimas del carterismo.

"Hace dos años que me dedico a esto, y debo haberle devuelto documentación y tarjetas a unas 200 personas", afirma Oscar Territo en diálogo con el diario La Nación.

Por haber pasado tanto tiempo en el subte dice conocer cada uno de los recovecos donde los punguistas esconden todo eso que desechan luego de vaciar una billetera. Además se dedica a rastrear a sus dueños.

"Hace dos años que me dedico a esto, y debo haberle devuelto documentación y tarjetas a unas 200 personas", cuenta Oscar. No pide nada a cambio, pero la gente, por lo general, suele darle algo de dinero. Y para un hombre sin trabajo, eso ayuda.

"Yo lo dejo a voluntad, si no me dan, no me dan. Pero si me pueden ayudar, mejor", dice Oscar. Trabajó un tiempo en una empresa de seguridad privada, pero tuvo que dejar el empleo por inconvenientes con los horarios.

"Los turistas son los más distraídos"
, afirma Territo.

Cuando no hay direcciones, pero sí teléfonos de contacto, Oscar cita a la gente en el centro. "Les digo de encontrarnos en el Mc Donalds, cerca del obelisco. Es un lugar bien céntrico y eso ayuda a que sepan que soy de confianza", dice Oscar. Y dado lo extraño de su "trabajo", la confianza es fundamental.