DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

El nuevo problema de Australia: invasión de arañas venenosas

Las lluvias fuertes trajeron una especie de arañas venenosas que se benefició de las condiciones climáticas.

Luego de los incendios forestales que devastaron Australia en las últimas semanas, dejando un total de 20 muertos y cientos de hogares y especies muertas, una nueva amenaza se benefició de las condiciones climáticas a raíz de las fuertes lluvias de la semana pasada. 

Se trata de una especie de arañas venenosas que invadieron algunas zonas de los estados de Victoria y Nueva Gales del Sur el problema persiste-, pero, al parecer, provocaron un nuevo peligro.

El martes pasado, el Parque de Reptiles de Australia, ubicado en una localidad cercana a Sídney, publicó una alerta en Facebook: "El clima húmedo seguido de días calurosos crearon las condiciones ideales para que las arañas de tela en embudo prosperen". "Advertencia", dijo el comunicado. "La temporada de arañas de tela en embudo comenzó".

Pero los expertos aseguran que las llamas solo pospusieron un suceso inevitable. "Existe, por lo general, una temporada de arañas de tela en embudo y [este año] se retrasó", dijo a The Washington Post Jonathan Coddington, curador de arácnidos y miriápodos del museo Smithsonian de Historia Natural de Washington, Estados Unidos. "A las arañas les gusta el clima húmedo. Ahora [en Australia] tienen un montón de lluvia, así que esas arañas están emergiendo desde el suelo", explicó el especialista.

Hay, además del clima, otra razón que explica la aparición de las arañas. "Sobre todo, los machos comenzarán a salir en busca de una hembra con la cual aparearse", dijo Dan Rumsey, que trabaja en el Parque de Reptiles.

La araña de tela en embudo, clasificada como "mediana a grande" por el Museo Australiano, tiene una mala reputación, debido al veneno que poseen algunas de las especies que componen esta familia de arácnidos.

No obstante, no hay registros de muertes relacionadas con este tipo de araña desde 1981, en parte gracias a la aparición de un antídoto que fue desarrollado ese año. "Los australianos tienen mucho más de qué preocuparse en este momento", concluyó Rod Crawford, también curador de arácnidos, del Museo Burke de Washington.

Dejá tu comentario