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El emocionante relato de Rocío Marengo sobre el día en que fue mamá

La modelo habló a corazón abierto sobre el nacimiento de Isidro, su primer hijo, y contó cómo evoluciona el bebé, que permanece en neonatología.


El nacimiento de Isidro, el primer hijo de
Rocío Marengo y Eduardo Fort, se convirtió en uno de los momentos más emotivos del año para la pareja. Tras un embarazo muy deseado pero atravesado por dificultades, la llegada del bebé —el 3 de diciembre de 2025 a las 10:54, en el Sanatorio Otamendi— estuvo cargada de nervios, miedo, alivio y una felicidad que desbordó a toda la familia.

En diálogo con La mañana con Moria (El Trece), Marengo abrió su corazón y compartió por primera vez cómo vivió una jornada que, según confesó, “le cambió la vida para siempre”.

Un camino complejo hacia la maternidad

La modelo debió ser internada en la semana 33 de gestación para hacer reposo absoluto, debido a complicaciones que encendieron las alarmas de su equipo médico. Ese período estuvo marcado por la incertidumbre, la ansiedad y una enorme red de contención familiar.

“Se me vienen a la cabeza muchos recuerdos de este camino que no fue fácil, pero hoy lo podemos disfrutar”, expresó. “Es muy lindo ver a los hijos de Edu, la familia se ensambló de una manera hermosa. Este bebé trae alegría y unión”.

El día del nacimiento: corridas, nervios y decisiones inesperadas

Marengo relató que el día del parto comenzó como uno más dentro de la internación.

“Desayuné, me hicieron los estudios… y ahí empezaron a decir que había que sacarlo”, contó con sinceridad.

La urgencia tomó a todos por sorpresa: “Lo llamamos a Edu y parecía que no llegaba. Entonces le dicen a mi hermana, que estaba conmigo: ‘Cambiate y vení vos’. Fue todo muy rápido, muy a las corridas. Por suerte después él llegó también”.

En el quirófano, la mezcla de miedo y adrenalina se hizo presente.
“En un momento me asusté y pregunté: ‘¿Por qué no podemos esperar un poco más?’. Pero después fue todo maravilloso, mejor incluso que si hubiera sido programado”, confesó.

El primer abrazo: el instante que lo cambió todo

Uno de los momentos más fuertes de su relato fue el del primer contacto con Isidro: “Él empezó a llorar y a moverse, pero al segundo de ponerlo en mi pecho, se calmó al toque. No lo podía creer”, recordó con emoción.
Aunque llegó con semanas de anticipación, el bebé respondió muy bien desde el principio.

Actualmente, Isidro permanece en neonatología por precaución.
“En cualquier momento le sacan un aparatito que le está ayudando a respirar por haber nacido antes. Está perfecto, evoluciona bárbaro”, explicó Marengo, transmitiendo alivio y tranquilidad.

Un nacimiento que unió a toda la familia

Desde la internación hasta la llegada de Isidro, el entorno de Marengo y Fort se mantuvo cerca, ofreciendo apoyo constante. Amigos, familiares y colegas del espectáculo enviaron mensajes de cariño apenas se conoció la noticia.

Para Rocío, la llegada de su hijo representa mucho más que la concreción de un sueño. Es un hito emocional y familiar que marca el inicio de una nueva etapa. “Este bebé vino a unir, a transformar, a traer alegría”, dijo conmovida.

A días del nacimiento, Marengo continúa recuperándose mientras acompaña los progresos de su hijo, quien sigue bajo observación pero con una evolución muy favorable. La felicidad, asegura, es inmensa.

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