Droga y bañadera: ¿coctel mortal?
A lo largo de la historia muchos consumidores de drogas perdieron la vida durante un baño de inmersión, como le pasó al actor Philip Seymour Hoffman.
Tras la muerte del actor Philip Seymour Hoffman, que fue encontrado ayer sin vida en el baño de su departamento de Nueva York, un nuevo caso de adictos que mueren en una bañadera se sumó al historial de estos absurdos finales.
De hecho Viviana Vitali, la ex pareja de Rodolfo Bomparola, el líder de la banda de los narcos vip, recordó la muerte de Jazmín de Grazia, que también fue víctima de las drogas en un baño: "Rodolfo me decía: 'Es una tarada, porque se tomó un ansiolítico y se fue a tomar una ducha. Le dije mil veces que no lo hiciera'".
En ese sentido, las doctora Ana María Méndez y Ana Girardelli y la psicóloga Laura Coccia analizaron con "Chiche" Gelblung por qué los adictos mueren en las bañaderas:
¿Qué pasó con Philip Seymour Hoffman?
Girardelli: "Siendo opiáceos, no hay una relación fisiológica con respecto al baño, sino que en el caso de Philip Seymour Hoffman creo que se quiso quitar la vida. El habría consumido Pentanilo, que es mayor de la morfina y su efecto es más rápido. Es posible que lo mezclara con la heroína para que el efecto fuera más prolongado".
Coccia: "Las personas que se suicidan dan señales muy sutiles, y los que son anunciados o dejan cartas son muy inusuales".
¿Por qué el desenlace fatal se produce en un baño?
Girardelli: "Los que usan la cocaína se meten en un baño caliente para bajar la frecuencia cardíaca, y ahí se muere por ahogamiento".
Méndez: "En general en estos baños de inmersión en donde se busca una situación de relajación se producen modificaciones en la frecuencia cardíaca y en la presión arterial. También depende de la temperatura del baño y del tiempo que se permanece".
"No es aconsejable tomar un baño de inmersión cuando uno se droga porque en ese estado se produce una alteración del sistema nervioso central y del sistema cardiovascular, lo que trae infartos o incluso accidentes cerebro vasculares".
"El organismo se va dañando en los consumidores de alta data, en particular en el aparato cardiovascular".
¿Cómo se "cuidan" los adictos?
Girardelli: "No es que hayan aumentado los casos que se atienden, no por el consumo, sino porque la gente aprendió cómo hacer cuando se sienten mal".
"Si tienen un grado de excitación se toman un ansiolítico, o si se sienten con temperatura alta, se sumergen en agua fría. Lo que pasa es que en vez que los vea un médico, los puede llegar a ver un forense".
Méndez: "Los casos que han ocurrido se tratan de personas con una adicción ya instalada y un consumo de alta data, donde predomina la pulsión de muerte por sobre la de vida. Estas personas suelen deambular casi permanentemente en el borde de la vida y la muerte y no están capacitados para su autocuidado, y desconocen las consecuencias que trae el consumo de sustancias".