Causa Cuadernos: el juicio se reanuda hoy con dos audiencias semanales para acelerar el proceso

El juicio por la causa Cuadernos vuelve a activarse este martes en un escenario marcado por pedidos de mayor celeridad y tensiones institucionales. El Tribunal Oral Federal 7 retomará el debate a las 13 con la continuidad de la lectura del requerimiento de elevación a juicio de los 86 imputados, y pondrá en marcha un nuevo esquema que prevé dos audiencias por semana para agilizar el avance del expediente.

El tribunal espera completar esta etapa el 2 de diciembre, en un contexto donde persiste la discusión sobre la logística necesaria para sostener un proceso de semejante magnitud: la causa reúne 540 hechos vinculados a presuntos pagos ilegales y abarca a exfuncionarios, empresarios y arrepentidos.

Entre los acusados figuran Cristina Kirchner, Julio De Vido, José López, Roberto Baratta, Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi, además de empresarios como Angelo Calcaterra, Aldo Roggio, Carlos Wagner, Gerardo Ferreyra, Héctor Sánchez Caballero, Armando Loson, Néstor Otero y Alberto Taselli. También se encuentra imputado Oscar Centeno, el chofer cuyos cuadernos originaron la investigación.

La semana pasada, el tribunal sobreseyó a Enrique Pescarmona tras recibir un informe del Cuerpo Médico Forense que confirmó una “incapacidad mental sobreviniente” producto de una enfermedad neurodegenerativa progresiva. Esa resolución permitió cerrar un capítulo paralelo al juicio y reforzó el foco en la necesidad de imprimir mayor velocidad al proceso.

Mientras tanto, continúan las tensiones institucionales. La Cámara de Casación y el Consejo de la Magistratura insistieron en la importancia de acelerar el juicio, disponer de salas adecuadas y avanzar hacia la presencialidad. Desde el TOF7 respondieron con nuevos pedidos formales y recordaron que cualquier intervención externa que afecte la organización del proceso podría interpretarse como un riesgo para la independencia judicial.

Las primeras audiencias y las declaraciones clave

Las instancias iniciales del juicio incluyeron la lectura de los testimonios de arrepentidos como Claudio Uberti y Carlos Wagner. Uberti mencionó, a partir de dichos de terceros, que “el día que murió Néstor Kirchner había más de US$60 millones en el departamento de Juncal”. Wagner, por su parte, describió el funcionamiento del presunto sistema de recaudación ilegal y aseguró que la obra pública “había sido pensada como un método de financiamiento para los gastos políticos”.

También se leyó la declaración de Oscar Centeno, quien detalló el circuito de entrega de bolsos y afirmó que, durante el gobierno de Cristina Kirchner, parte del dinero llegaba hasta la Quinta de Olivos. Solo esta etapa anticipa la extensión del juicio: se prevén más de 600 testigos.

El ritmo de estas primeras audiencias llevó a Casación a marcar la necesidad de una mayor velocidad. Incluso el juez de la Corte Suprema Ricardo Lorenzetti reclamó públicamente que el tribunal “trabaje durante el verano” para garantizar la celeridad. El TOF7 respondió señalando limitaciones edilicias, falta de personal y dificultades logísticas para adoptar un formato totalmente presencial.

El nuevo esquema de funcionamiento

Desde este martes, el tribunal incorporará un régimen de dos audiencias por semana, los martes y jueves, que por ahora continuarán bajo modalidad virtual. El TOF7 sostiene que este sistema permitió iniciar el juicio sin demoras y asegura que cualquier cambio requiere infraestructura que aún no está disponible.

La Sala AMIA de Comodoro Py, sugerida por Casación como sede para pasar a la presencialidad, sigue en obras y recién estaría habilitada el 10 de diciembre.

En los próximos meses, el TOF7 deberá equilibrar la presión por acelerar el trámite con su reclamo de autonomía y recursos. La audiencia de hoy, con la reanudación de la lectura de la elevación a juicio, será el primer test del nuevo esquema de trabajo.