ADN-sorullo deschava mascotas maleducadas
En EE.UU. se generaliza el uso de detectores de ADN para identificar dueños que no recogen las deposiciones de las mascotas. La ciencia al servicio de una vida sin pisar soretes de perros ajenos.
Los pioneros fueron un grupo de vecinos de Florida, EE.UU., quienes comenzaron a realizar pruebas de ADN a los excrementos de los perros para identificar a los dueños que no levanten del suelo la mierda que depositan sus mascotas en las zonas comunes de un complejo de apartamentos. Ahora se ha sumado el Estado de Massachusetts, que ha alentado la inserción y desarrollo de la compañía PooPrints, especializada en resolver el misterio de "quién ha dejado el montículo ofensivo".
La asociación de vecinos de The Village of Abacoa, en la ciudad de Júpiter, en la costa este de Florida, amenaza con imponer 1.000 dólares de multa a aquellos dueños de perros cuyo ADN de excrementos no recogidos coincida con el registrado en un sistema de información genética.
Para poner en marcha el sistema, los residentes del complejo residencial de 485 viviendas abonarán 200 dólares a la empresa DNA Pet World Registry para que archive la información genética de los perros, que llevarán un collar con la identificación respectiva.
Una vez que los datos fueron almacenados, se tomarán muestras de los "pasteles" de caca sin recoger halladas en las áreas comunes, las cuales serán enviadas a esta compañía para su análisis.
Según la asociación de vecinos, para limpiar excrementos de perro abandonados gastan entre 10.000 y 12.000 dólares.
El sistema ADN-sorullo es, entonces, una inversión más que razonable, ya que no solamente se esperan menos infractores. También habrá una notable recaudación entre los perreros indolentes.