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¿Lousteau contra Macri? Por qué los radicales le muestran los dientes al PRO para 2019

En el radicalismo quieren más espacio, pero también tienen objetivos en el Congreso.

En los últimos días el diputado nacional y ex ministro de Economía, Martín Lousteau, continuó con su reclamo para que Cambiemos abra las PASO presidenciales para ver si tiene, o no, chances de competir en la interna contra el actual presidente Mauricio Macri que buscará su reelección en octubre.

Durante la gira que llevó adelante por diferentes países de Asia junto a Macri, Lousteau pidió, tanto off como on the record que se habilite esa interna. Sin embargo la pregunta que se hacen muchos es ¿qué hay detrás de esa intención de la Unión Cívica Radical (UCR) a través del diputado?

Lo cierto es que tanto en el PRO como en la UCR dan por descontado que en una interna Lousteau tiene como techo máximo, hoy en día, un 15% de los votos de Cambiemos, por lo que sería una nueva derrota para el candidato que casi le ganó en 2015 al actual jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y que viene de salir tercero en los comicios de 2017 detrás de Elisa Carrió y Daniel Filmus respectivamente.

Dentro de la UCR se esperanzan con que el lanzamiento de quien se espera que sea la nueva cara del partido que desde hace tiempo carece de candidatos a nivel nacional con cierto nivel de aceptación e imagen positiva. Sin embargo la mirada no está puesta sólo en la eventual PASO sino en lo que suceda entre otras áreas en la Cámara de Diputados.

El actual presidente de la Cámara Baja, Emilio Monzó, tiene decidido dejar el cargo a fines de año o antes para ocupar la embajada argentina en España. Incluso llegó a pedir que se acelere su salida para que sus hijos puedan arrancar el ciclo lectivo en Madrid y no pierdan días de clase. Para eso, su esposa llegó a intermediar con Juliana Awada dado que ambas tienen una relación de amistad.

La salida de Monzó iría también acompañada por la del presidente del bloque de Unión PRO, Nicolás Massot, quien tiene "una deuda de lealtad" con al actual titular de Diputados. Ante la falta de nombres, y la intención del actual jefe del interbloque de Cambiemos, Mario Negri, de competir fuerte en Córdoba, se abrió el juego.

En el oficialismo manejan a dos candidatos para ocupar el puesto. El primero de ellos es el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo, quien ya manifestó su deseo de salir de la gestión en la "cartera más caliente de la provincia". A su favor tiene que es un "alumno ejemplar" de la gobernadora María Eugenia Vidal y que llevó adelante una fuerte limpieza en la "maldita policía": la Bonaerense.

Ritondo además trae consigo la experiencia de ocho años en labor legislativa en la Legislatura porteña, en donde finalizó su mandato en 2015 como vicepresidente primero, cargo similar al que buscaría ocupar en el Congreso. "Sabe cómo funciona y tiene una buena idea de cómo articular", explican en Cambiemos.

Detrás de él se encuentra el actual vicejefe porteño y ministro de Justicia y Seguridad, Diego Santilli, que primero debe definir si acepta o no acompañar a Rodríguez Larreta en la fórmula de la reeleción porteña. De hacerlo quedará inhabilitado para competir por la alcaldía de la Ciudad en 2023, que es su principal objetivo. Al igual que Ritondo, se le reconoce la capacidad para articular y conseguir acuerdos políticos y parlamentarios.

Pero la UCR también tiene a su nombre: se trata del gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, que será candidato a diputado nacional por dicha provincia. Cornejo también coquetea con ser precandidato presidencial, pero entiende bien, de acuerdo a lo que le dijo a varios interlocutores, que "el juego va por otro lado".

Cornejo buscaría ingresar a la Cámara de Diputados no para quedarse con la presidencia del interbloque, que ve con buenos ojos, sino para ser el presidente de la Cámara. Eso le permitiría, además de ser el cuarto el tercero en la sucesión presidencial, ser el encargado de los gastos.