La nueva frontera del empleo: “Hoy la empleabilidad se mide en tu huella digital, no en tu currículum”
En un mercado laboral cada vez más competitivo y atravesado por la inteligencia artificial, el perfil digital dejó de ser un complemento para transformarse en el principal filtro de selección. Lina Zubiria, especialista en transformación digital, explica cómo construir una marca personal sólida y por qué LinkedIn se convirtió en la vidriera profesional más influyente.
En el tablero global del trabajo, la digitalización ya no es una opción: es el idioma que define quién tiene voz y quién queda en silencio. El mercado laboral cambió de reglas: los algoritmos filtran currículums, los reclutadores escanean perfiles en segundos y la huella digital pasó a ser un indicador de empleabilidad tan relevante como la trayectoria académica. En este nuevo escenario, tener un currículum impecable pero un perfil digital descuidado equivale a no estar en carrera.
Argentina no es ajena a esta tendencia. Las empresas locales y multinacionales que buscan talento en el país utilizan LinkedIn como primer punto de validación. Allí no solo se observa la experiencia profesional, sino también la coherencia, el networking y la capacidad de transmitir habilidades blandas en un entorno virtual. En otras palabras, la marca personal pesa más que nunca.
Lina Zubiria, especialista digital y referente en procesos de transformación profesional, sostiene que la clave para destacarse ya no está en enviar decenas de CVs, sino en diseñar una estrategia digital consciente. Desde su experiencia, los errores más comunes en los perfiles de LinkedIn no son técnicos sino estratégicos: fotos inadecuadas, titulares genéricos, resúmenes poco atractivos o falta de interacciones. “Hoy no alcanza con contar lo que hiciste: tenés que mostrar impacto, logros y diferenciales”, resume.
En diálogo con Infoveloz, Zubiria adelanta algunos de los ejes que abordará en su próximo webinar gratuito “Reinventarse y buscar trabajo”, y comparte recomendaciones concretas para quienes buscan —o no— un cambio laboral, pero quieren estar listos para cuando la oportunidad aparezca.
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—Hoy se habla de que más del 90% de los reclutadores revisa LinkedIn antes de contactar a un candidato. ¿Qué tan determinante es hoy el perfil digital frente al currículum tradicional?
—El perfil digital es fundamental. Los reclutadores suelen mirar primero las redes sociales antes incluso de leer el CV. Ya no es un complemento: es el primer filtro. LinkedIn permite validar trayectoria, coherencia, networking y posicionamiento. Un buen currículum abre la puerta, pero un perfil digital sólido confirma que vale la pena abrirla.
—¿Qué errores frecuentes observa en los perfiles de LinkedIn de profesionales argentinos?
—Muchos no aprovechan todas las herramientas gratuitas que ofrece la red. Los errores más comunes son: foto poco profesional o ausente, titulares genéricos como “En búsqueda activa”, experiencia laboral copiada del CV sin adaptación, falta de recomendaciones o interacciones, y no cargar aptitudes. Todo esto debilita la visibilidad del perfil.
—¿Qué tan importante es el “pitch” de presentación?
—Es central. El resumen o “Acerca de” responde en pocas líneas quién soy, qué valor aporto y por qué deberían interesarse en mí. No alcanza con detallar experiencia: hay que mostrar impacto, logros y diferenciales, idealmente con datos concretos.
—¿Se pueden transmitir habilidades blandas en una red profesional como LinkedIn?
—Sí, y no basta con listarlas. Se transmiten en el tono del contenido, los proyectos compartidos, las recomendaciones de colegas y la forma en que uno interactúa. Un perfil activo, colaborativo y bien redactado habla de nuestras capacidades de comunicación, liderazgo y trabajo en equipo.
—En un mercado tan competitivo, ¿cómo se capta la atención en esos primeros segundos de lectura?
—Un reclutador escanea el perfil en menos de 10 segundos. Por eso recomiendo: un titular fuerte y estratégico, una foto profesional, un banner personalizado, un “Acerca de” atractivo y palabras clave específicas alineadas al puesto deseado.
—¿Qué pasa con quienes sienten que están sobrecalificados y aun así no reciben propuestas?
—LinkedIn permite contextualizar la experiencia. Aunque alguien esté sobrecalificado, si comunica flexibilidad, motivación y apertura, se equilibra esa percepción. Compartir contenido y mostrar aprendizaje constante transmite actualización y evita la rigidez.
—¿Qué peso tiene hoy la marca personal en la decisión de contratación?
—Muchísimo. No es un proyecto paralelo: es parte esencial del posicionamiento profesional. En entornos competitivos ya no se contrata solo por el CV, sino también por lo que representamos como profesionales.
—¿Y la capacitación online?
—Tiene un peso clave. El cambio es constante y la selección también. Más del 70% de los CVs pasan hoy por filtros de inteligencia artificial. Si no adaptamos nuestros currículums a esa realidad, quedamos fuera del proceso. Mantenernos actualizados es imprescindible.
—En su webinar hablará de reinvención laboral. ¿Qué podrán esperar los asistentes?
—El 7 de octubre a las 18.30 brindaré un webinar gratuito sobre “Reinventarse y buscar trabajo”. Compartiré tendencias y herramientas concretas para potenciar la marca personal y la huella digital. Veremos cómo optimizar LinkedIn, construir un pitch efectivo, entender qué miran los reclutadores y cómo armar un CV legible para la IA.
—¿Qué consejo daría a alguien que hoy no está buscando empleo, pero quiere estar preparado?
—Que mantenga su perfil vivo. No hay que esperar a estar en crisis para actualizarlo. Recomiendo publicar ocasionalmente, evitar errores comunes y conectar con colegas. La empleabilidad es como el estado físico: mejor entrenar un poco cada semana que empezar de cero cuando hay urgencia.
“Hoy buscar trabajo requiere estrategia digital y autoconocimiento. La empleabilidad ya no se mide en páginas impresas, sino en la capacidad de construir una presencia sólida y coherente en el mundo online”, concluye Zubiria.
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