La CGT insistirá con el proyecto para el reparto de ganancias de las empresas

El consejo directivo de la Confederación General del Trabajo (CGT) resolvió hoy "insistir" con su agenda mediante una nota que enviará al ministro de Trabajo, Carlos Tomada, respecto de las asignaciones familiares, el mínimo no imponible, la ley de distribución de ganancias y los fondos de alta complejidad de las obras sociales.

El secretario de Capacitación y Formación Profesional de la CGT, Juan Carlos Schmid, señaló en conferencia de prensa que "se resolvió elevar una nota a Tomada para retomar esos temas, que formaban parte de las demandas de la central antes de las elecciones" para aclarar que "no son temas que se incorporaron ahora".

Al ser consultado acerca de las versiones de un próximo piso del 18 por ciento para las negociaciones salariales, Schmid aludió que "no nos manejamos con las versiones o expectativas sino con la realidad concreta de las negociaciones, que se reabrirán en marzo".

"En la reunión pusimos énfasis en la ley de reparto de ganancias", informó, y expresó que "la posición de la CGT es que sea tratada en el Congreso"; en tanto se refirió a las asignaciones familiares y el mínimo no imponible al destacar que "el consejo directivo no habló de cifras sino que realizó una formulación de carácter político".

Al respecto, aclaró que es de interés de la central obrera que "se respete la universalidad de las asignaciones familiares, ya que cada vez que se producen aumentos el beneficio opera desfasado, al igual que el mínimo no imponible", lo que consideró "una discriminación".

Consultado sobre el precio de la canasta navideña elaborado por la Secretaría de Comercio Interior, consideró: "Seguramente esos precios saldrán del Mercado Central y deberían existir miles en los grandes centros urbanos para terminar con una posición irritante en el rubro alimentario, que es la mayor fuente de corrimiento de precios".

"No caeremos en la discusión política de si hay o no inflación; la CGT cuando discute salarios lo hace en función de mantener poder adquisitivo, que a lo largo de los años hemos conseguido", aclaró.

El también secretario general del Sindicato de Dragado y Balizamiento apuntó que "lo que hace la CGT respecto de la defensa de los trabajadores y del modelo nacional y popular es tener una fuerte coherencia con ese proceso iniciado en 2003".

Schmid definió el vínculo actual de la CGT con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner como "una relación entre dos actores sociales y políticos en un sistema democrático" y agregó: "Nosotros somos una central obrera que representa intereses concretos y, la presidenta, la voluntad que fue ratificada por el 54 por ciento de los votos de la población argentina".

"La presidenta dijo en la cumbre de la Unión Industrial Argentina (UIA) que los niveles de rentabilidad de los sectores empresarios son los más altos en el mundo, de manera que no nos parece alocado que pretendamos participar en las ganancias", consignó.

Agregó, en ese sentido, que la CGT "insistirá" en el tratamiento parlamentario de la norma y sugirió que "sería muy bueno que se encuentre una fórmula para discutir el tema si no es por ley, porque lo que menos queremos hacer es elevar el nivel de conflictividad por algo que seguramente está en el sentido común de los dos actores".

Schmid consideró que la "sintonía fina" aludida por la presidenta "compete algunos aspectos que la CGT cree hay que abordar en esta etapa del gobierno, como una ley de entidades financieras y otra de inversiones".

"Estamos tan preocupados como el gobierno nacional de que haya aún, luego de tantos años de crecimiento, un porcentaje muy numeroso de compatriotas que no tienen seguridad social ni convenio colectivo de trabajo", añadió.

El gremialista sumó a las demandas de la central el tema de las tercerizaciones laborales al señalar que "la CGT, a través de sus diputados, presentó el año pasado un proyecto para que el Parlamento trate la problemática y termine con ese flagelo, que afecta a cientos de miles de trabajadores".

"Esperemos que la representación política y el gobierno nacional promuevan una ejecución alrededor de ese tema", manifestó al respecto.

Schmid, además, manifestó que la CGT "no descarta que algunos gremios demanden al Estado nacional por sus deudas con las obras sociales, en especial las más pequeñas, que están en una situación muy difícil, sobre todo en relación con las enfermedades de alta
complejidad".

En ese sentido, el vocal titular de la CGT Omar Plaini solicitó "agilizar los expedientes de la Administración de Programas Especiales (APE) y los fondos de redistribución de las obras sociales, que pertenecen a los trabajadores".