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Khadafi: "No abandonaremos nuestras tierras"

El líder libio calificó hoy de "acto de terrorismo" a la intervención militar internacional sobre su país y advirtió que luchará hasta el final con la ayuda de sus seguidores, a quienes les abrió los arsenales de las zonas que tiene aún bajo control para que puedan armarse.

"No abandonaremos nuestra tierra y vamos a liberarla", advirtió el histórico dirigente a través de un nuevo mensaje de audio retransmitido por la cadena oficial, un día después de que Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos lanzaran bombardeos.

Mientras se escuchaban las palabras de Khadafi, se mostraba la escultura levantada en su residencia de Trípoli, que exhibe un puño dorado que aplasta un avión de combate stadounidense.

El líder libio también anunció que su país se está preparando para lo que será "una larga guerra" contra lo que calificó como "la coalición del diablo", que será "derrotada".

"¿No aprendieron nada del pasado? ¿Dónde están las lecciones de Vietnam y Somalia? Siempre los derrotan y los destruyen. Incluso Osama Ben Laden, ese debilucho, los venció", declaró Khadafi.

En su arenga, anunció que "incluso las mujeres libias" lucharán contra la intervención que comenzó ayer con el bombardeo de las posiciones de sus tropas cercanas a la ciudad rebelde de Benghazi.

Por otra parte, al igual que como lo hizo en otras ocasiones desde que comenzó el conflicto, dijo que los arsenales de las zonas bajo su control están a disposición de sus seguidores para que puedan armarse ante lo que calificó de "acto de terrorismo" y un intento para "explotar" la riqueza petrolera del país.

"Esta es nuestra tierra y moriremos como mártires", advirtió, y señaló: "Estamos dando armas a todos los libios, ametralladoras, todos los ciudadanos irán armados, no podrán aterrizar aquí".

En su proclama, salpicada de menciones al pasado colonial en Libia, añadió: "Incluso Benghazi protestará, levantará la bandera verde, las mujeres protestarán contra esta coalición cristiana".

"Serán derrotados como lo fueron Hitler y Mussolini, ya no es tiempo de ejércitos, es la hora del pueblo", aseveró.