El Tribunal define la pena para los integrantes del clan Sena, culpables del femicidio de Cecilia Strzyzowski
Comienza la audiencia de cesura en Resistencia, donde la jueza Dolly Fernández evaluará agravantes, responsabilidades y el rol de cada acusado antes de fijar las condenas por el crimen ocurrido en 2023.
Este miércoles, se iniciará en Resistencia la etapa final del juicio por el femicidio de Cecilia Strzyzowski. Tras el veredicto del jurado popular que declaró culpables a los integrantes del clan Sena, la Justicia chaqueña dará comienzo a la audiencia de cesura, un tramo técnico pero decisivo del proceso.
En esta instancia se determinarán las penas para cada uno de los condenados, entre ellos César Sena y sus padres, Emerenciano Sena y Marcela Acuña, además de los colaboradores implicados en los hechos.
La definición quedará a cargo de la jueza Dolly Roxana Fernández, quien escuchará los planteos de las partes durante varios días antes de fijar las sentencias. La atención se centra especialmente en los tres miembros principales del clan piquetero, considerados responsables directos del crimen.
Fuentes judiciales señalaron que, para el delito por el cual fueron declarados culpables —homicidio doblemente agravado por el vínculo y por violencia de género— la legislación contempla una única sanción posible: prisión perpetua.
La audiencia se llevará a cabo en una sala de la Cámara Segunda en lo Criminal de Resistencia y funcionará como un “mini juicio” dedicado exclusivamente a analizar la escala penal aplicable. Tanto la Fiscalía como las querellas y las defensas podrán presentar pruebas adicionales, discutir agravantes y atenuantes, y fundamentar sus pedidos de pena.
En paralelo, esta etapa también abarcará a los tres colaboradores que participaron del encubrimiento del femicidio: Fabiana González, Gustavo Obregón y Gustavo Melgarejo. En sus casos se espera un debate más intenso, ya que las defensas buscarán marcar diferencias en los roles y reclamar reducciones de pena según el grado de participación. Melgarejo, que llegó a esta instancia en libertad, deberá igualmente recibir su condena definitiva.
El expediente alcanza este tramo casi dos años y medio después de la desaparición de Cecilia. Durante la investigación, la reconstrucción del caso se basó en elementos hallados carbonizados en un campo del clan Sena, junto al río Tragadero, que resultaron decisivos para probar que la joven ingresó con vida a la vivienda familiar y que nunca salió por sus propios medios.
En las últimas semanas, los fiscales remarcaron que esta fase no vuelve a discutir la culpabilidad, ya establecida por el jurado popular, sino que define la respuesta penal del Estado y completa el proceso judicial.
Una vez fijadas las penas, todas las partes podrán apelar ante instancias superiores, por lo que se prevé que la causa continúe su recorrido judicial en los próximos meses.
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