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El oficio de mirar hacia otro lado

*Por Daniel Fernández Canedo. La aparición del cuerpo de Lucas Menghini Rey 55 horas después de que el tren se estrellara contra las defensas de la estación Once...

... sumó horror al inmenso horror que ya habían generado 50 muertes.

La historia indica que fue el padre de Lucas el que indujo a la Policía y los bomberos para que volviesen a buscar en el cuarto vagón, donde las cámaras de la estación de San Antonio de Padua registraron su ingreso al convoy en la mañana del miércoles.

Allí estuvo el cuerpo el miércoles, el jueves y hasta la tarde del viernes y algunas preguntas resultan inevitables. ¿En qué momento habrá muerto el joven de sólo 20 años? ¿Pudo darse el caso de que haya estado vivo e incapacitado de pedir ayudadurante horas? Tal vez algunas respuestas las pueda dar una autopsia, pero es difícil que eso logre atenuar el dolor y la bronca de sus familiares y amigos que ayer estuvieron firmes en la terminal de Once a la espera de noticias.

Bomberos, policías, médicos y auxiliares de la salud trabajaron muy duro en el rescate de las víctimas. Pero la demora para encontrar el cuerpo del joven pone a la profesionalidad de quienes asumieron la conducción de la tarea de los rescatistas en un cono de sombras muy oscuro . Se necesitaron 55 horas para dar con Lucas, demasiado teniendo bastantes indicios de que debería estar en los primeros cuatro vagones del tren.

Como casi siempre, los responsables directos y políticos de la tragedia iniciaron el camino de poner las culpas en otros.

Veloz, el Gobierno buscó ponerse en víctima al presentarse como damnificado.

La concesionaria, que recibe subsidios públicos por la política que lleva adelante el Gobierno, sólo atinó a decir que el servicio que presta es"aceptable" .

El conductor, sobre el que querrían caer el Gobierno y la empresa, para que todo se explique por un error humano, dijo que los frenos no respondieron.

El dolor de los familiares es inmenso. Los responsables, intentan mirar para otro lado y escapar de las apariciones públicas.