El Gobierno busca un primer paso para la “coalición para el futuro”: incorporar al PRO al interbloque en Diputados
La Casa Rosada analiza acuerdos con sectores opositores y gobernadores para garantizar la aprobación de reformas tributarias y laborales. La incorporación del PRO al interbloque oficialista sería la primera acción clave.
El oficialismo de La Libertad Avanza explora la creación de una “coalición para el futuro” que le permita ampliar su base política y asegurar la gobernabilidad tras las elecciones. En este marco, el primer paso que analiza la Casa Rosada es negociar la incorporación del PRO al interbloque en la Cámara de Diputados, según indicaron fuentes oficiales y legislativas.
El lobbista estadounidense Barry Bennett recomendó en reuniones con funcionarios y opositores dialoguistas que el Gobierno debía configurar un esquema de gobernabilidad que le permita avanzar con las reformas tributaria y laboral, consideradas esenciales para atraer inversiones privadas al país.
El asesor presidencial Santiago Caputo está al frente del diseño estratégico para este acercamiento. Según explicó, la prioridad es formalizar la participación del PRO en el interbloque oficialista, que actualmente integran La Libertad Avanza (37 bancas), Liga del Interior-ELI (6) y el monobloque CREO (1). La incorporación de los diputados amarillos garantizaría al Ejecutivo un número suficiente para sostener sus iniciativas y proteger los vetos presidenciales.
El proceso, sin embargo, no está exento de condiciones. El PRO busca preservar su identidad partidaria y evitar que la marca de La Libertad Avanza predomine sobre sus espacios. Además, las negociaciones dependerán de los acuerdos que alcance Mauricio Macri con Javier Milei y la disposición del bloque amarillo a integrarse formalmente.
El diálogo con gobernadores aliados también es parte de la estrategia. Durante el 61° Coloquio de IDEA, mandatarios como Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Alfredo Cornejo (Mendoza) y Leandro Zdero (Chaco) coincidieron en la necesidad de ampliar la base política para facilitar reformas estructurales. Destacaron que hay entre 12 y 15 gobernadores disponibles para respaldar medidas clave, aunque subrayaron que el Gobierno deberá ajustar su enfoque para asegurar su apoyo.
Fuentes cercanas a la Casa Rosada señalan que el proceso estará liderado formalmente por los jefes provinciales Guillermo Francos y Lisandro Catalán, y por Martín Menem en la Cámara de Diputados, mientras Caputo mantiene un rol de enlace con la oposición. El éxito de esta coalición marcará la hoja de ruta política de la segunda etapa del mandato de Milei.
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