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Detuvieron a policías involucrados en un secuestro

Dos efectivos de la Policía Federal fueron detenidos y otro permanece prófugo, en el marco de una investigación iniciada por el secuestro de un ciudadano peruano y bajo la sospecha de haber participado en robos con la modalidad de "boqueteros".

Personal del área de Investigaciones de la fuerza realizaba averiguaciones sobre un secuestro cuando surgieron sospechas de que efectivos de la comisaría 23, del barrio de Palermo, se encontraban involucrados en el hecho, según informó el comisario Sebastián Seggio.

"El trabajo que desde hace tiempo realiza la División Investigaciones de la Policía Federal sobre posibles implicados logró reunir elementos probatorios que motivaron la participación del juez federal Norberto Oyarbide", señaló Seggio, al hablar esta mañana con la prensa.

La apertura de la causa permitió que la división Antisecuestros de la Policía Federal detuviera a un oficial y a un suboficial, bajo la sospecha de haber participado en el secuestro de un ciudadano peruano, mientras que otro efectivo policial se encuentra prófugo, en el marco del mismo caso.

Durante un procedimiento realizado por una comitiva de la Superintendencia de Asuntos Internos de la Policía Federal, el sospechoso ahora prófugo pudo escapar por los fondos de su domicilio, después de haberse desprendido de cuatro armas de fuego.

"Teniendo en cuenta que en esta causa la Policía Federal aportó abundante cantidad de material, el juez cuenta con documentación que le permite seguir investigando y por el momento no podemos avanzar en la información debido al secreto de sumario", se excusó el comisario Seggio, al hablar con los periodistas en la puerta de la seccional 23ra.

Mientras tanto, en la tarde de ayer, el juez que interviene en la causa, junto al fiscal Patricio Evers, ordenó un allanamiento en la comisaría 23ra de Palermo en busca de elementos probatorios que permitan avanzar en la investigación.

Por otra parte, se conoció de fuentes judiciales que a la sospecha de que los efectivos habrían participado en secuestros extorsivos, se agrega la presunción de que también se vieran involucrados en robos realizados por medio de "boquetes".

Las escuchas telefónicas llevadas a cabo a raíz del secuestro, perpetrado en inmediaciones de la villa 1-11-14, indican también la posibilidad de que una estructura delictiva montada en la comisaria permitía establecer "zonas liberadas" dando lugar a distintos tipos de delitos.

En tal sentido pudo conocerse que la persona sospechada de ser el jefe de la organización se dedicaba a llamar a los jefes de calle para negociar la posibilidad de establecer una "zona liberada" en puntos estratégicos de ese sector de la ciudad.

Fuentes de la Superintendencia de Asuntos Internos de la Policía Federal resaltaron la voluntad de profundizar las investigaciones ya que "somos los primeros en querer meter presos a los policías que están fuera de la ley, porque no vamos a proteger a delincuentes".