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Continúa el conflicto: la Justicia ordenó allanar el Centro Cultural San Martín

Tras la ocupación de más de un mes, la Justicia ordenó que la sala Alberdi sea requisada.

La Cámara de Apelaciones en lo Penal, Contravencional y de Faltas porteña ordenó hoy el allanamiento de la "Sala Alberdi" del Centro Cultural San Martín, para identificar y desalojar a sus ocupantes, en respuesta a una apelación de la fiscal Claudia Barcia.

La medida, que dispone la constatación para la restitución de la sala ubicada en el séptimo piso del Centro Cultural, la firmaron los camaristas Elizabeth Marum, Marcelo Vázquez y José Saez Capel.

El tribunal, tras una apelación de la fiscal Claudia Barcia, revocó un fallo de primera instancia que se había opuesto a practicar ese procedimiento en el espacio ubicado en Sarmiento 1551 de esta capital.

La Cámara delegó en el magistrado de primera instancia, Ricardo Tabonasca, "el modo" del operativo, con intervención del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

La resolución de la cámara destacó que para el desalojo de la "Sala Alberdi" se deben tener en cuenta los derechos ocupantes.

El tribunal recordó que el bien cuya desocupación solicitó la fiscalía "se trata de un edificio perteneciente al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, donde funciona el Centro Cultural General San Martín, conforme surge del testimonio de unificación parcelaria y englobamiento predial".

El 13 de marzo pasado hubo varios heridos -un par de ellos con balas de plomo- y detenidos cuando la Policía Metropolitana desalojó la Plaza Seca del Centro Cultural San Martín, donde unos
veinte manifestantes realizaban un acampe en apoyo a las cuatro personas que ocupaban la sala.

El hecho que generó en el 2010 la toma de la Sala Alberdi tuvo su origen cuatro años antes, cuando el entonces jefe de gobierno local, Jorge Telerman, dispuso el trasladado de las actividades que se realizaban en el lugar para realizar refacciones.

Desde entonces los artistas populares y talleristas que desarrollaban actividades en el lugar se negaron a ser trasladados a la Sala Los Andes, en el barrio porteño de Chacarita.

En este sentido reclaman convertirse en tutores del espacio y garantes de su identidad histórica como "espacio de producción, divulgación y formación artística".