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Bronca en Villa Lugano por la alarma de una casa que no deja de sonar desde hace cuatro días

Las familias que viven en los domicilios cercanos piensan en cortar la luz del inmueble para solucionar el problema ellos mismos.

Una alarma que no deja de sonar desde hace varios días mantiene preocupadas a las familias que viven en una zona del barrio porteño de Villa Lugano, en el sur de la Ciudad de Buenos Aires. Los vecinos lograron contactarse en varias oportunidades con el dueño del inmueble en el que fue instalado el aparato, pero el hombre asegura que se encuentra de vacaciones en la Costa y promete, sistemáticamente, volver al otro día.

El calvario comenzó a mediados de la semana pasada, cuando por razones que aún se desconocen se prendió el sistema de seguridad de una casa ubicada sobre la calle Cafayate al 4614, entre José Barros Pazos y Coronel Martiniano Chilavert, al lado de un terreno baldío en el que recientemente se construyó un estacionamiento.


Desde que se encendió, la alarma no dejó en ningún momento de hacer ruido, lo que generó un malestar muy grande en las personas que viven en la cuadra, a quienes se les dificulta dormir por las noches como consecuencia del incesante sonido. Por esta razón es que intentaron comunicarse con el propietario de la vivienda en cuestión.

El problema fue que ninguno de los vecinos tenía el celular de este hombre, ya que suelen comunicarse con él a través del teléfono fijo de la casa, la cual pudieron comprobar que se encontraba desocupada. Entonces, decidieron consultarle a los dueños del estacionamiento lindante, quienes se negaron a dar los datos de este sujeto.

“Aceptaron hablar con un policía y le dijeron que supuestamente al otro día volvía de Las Toninas (el propietario de la vivienda en cuestión). Hoy lo volvieron a llamar y les dijo exactamente lo mismo, que mañana (por el martes) regresa. No le importa nada que le digamos que la alarma está sonando”, explicó Lucía Brandi, una vecina del lugar.

La joven precisó que, “en realidad, no está conectado” a ninguna red el aparato, ya que no fue instalado por alguna empresa de seguridad, sino que fue el propio hombre que ahora está de vacaciones quien “la puso de forma medio casera”. Por eso es que “la única manera de apagarlo es cortando la luz o entrando a la casa, pero nadie se anima a hacer ninguna de esas dos cosas”. Mientras tanto los vecinos siguen preocupados y esperan una pronta solución.

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