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Abrió una carnicería en marzo y ya le robaron cuatro veces

Un comerciante denunció que desde que abrió su propia carnicería, en el barrio platense de San Carlos, en marzo pasado, ya fue asaltado cuatro veces, la última de ellas a mano armada.

Un comerciante denunció que desde que abrió su propia carnicería, en el barrio platense de San Carlos, en marzo pasado, ya fue asaltado cuatro veces, la última de ellas a mano armada.

"Alguien tiene que hacer algo, porque a los comerciantes de esta zona nos tomaron de hijos, nos asaltan siempre a los mismos", se quejó Joel Lescano, dueño del comercio en el que ya se produjeron los cuatro asaltos en apenas cuatro meses.

El comerciante, en diálogo con el diario El Día de esta ciudad, reclamó que se refuerce la seguridad en ese sector.

El último de los episodios delictivos se produjo anteayer, cuando alrededor de las 20:00 Lescano estaba junto a un empleado limpiando la carnicería, ubicada en las calles 32 y 138, y un delincuente entró al negocio.

"En la puerta se subió la bufanda para taparse la cara, así que me imaginé que venía a robar", aseguró el carnicero.

Pero el ladrón no le dio tiempo a reaccionar. Abrió la puerta del local, sacó un arma de fuego y le apuntó al comerciante: "Esto es un asalto, dame toda la plata", fue todo lo que dijo el delincuente.

Todo ocurrió en pocos minutos: Lescano, sostuvo, no podía hacer nada para resistirse y le dio enseguida el dinero de la caja al ladrón, cuya suma, según estimó, rondaría los 500 pesos.

Después de eso, el asaltante, a quien nunca habían visto por el barrio, se dio a la fuga, sin que fuera atrapado por los efectivos que fueron a cubrir la denuncia hecha al 911.

La escalada de robos en ese sector de la Ciudad preocupa a los comerciantes, quienes insisten en que "esto es una zona liberada, es una cosa de locos lo que ocurre".

Sobre su propia experiencia, Lescano contó que llegó a sufrir dos robos en dos días. "Esos fueron de madrugada -explicó-. Y eso que es una esquina iluminada, pero nadie vio nada. Rompieron los vidrios y se llevaron la balanza y los elementos de trabajo. Cambiamos los vidrios y a la otra madrugada ya nos habían robado de nuevo", se quejó.