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A pesar de los riesgos, cada vez más gente consulta para realizarse cirugías en sus genitales

Los turnos en consultorios para estas intervenciones se quintuplicaron en la última década en mujeres de 20 a 60 años.

El marketing y la ciencia lo lograron: cada vez más hombres y mujeres consulta para realizarse cirugías en sus genitales. Así lo determinó una investigación de la Sociedad Argentina de Cirugía Plástica: en la última década se quintuplicaron los turnos en los consultorios para este tipo de intervención en mujeres de 20 y 60 años. De todas formas, pocos llegan al quirófano por el riesgo que puede afectar el placer sexual.

Las propuestas para las mujeres son, principalmente, para estrechar el canal vaginal, que consiste en inyectar ácido hialurónico, colágeno o grasa en el introito. Así, el tejido se engrosa y se angosta el ingreso a la vagina.

"La grasa o el colágeno son reabsorbidas por el cuerpo y podrían perder efecto en el corto plazo. El ácido hialurónico 'desaparece' entre los tres y seis meses después de ser aplicado", aseguró la ginecóloga Claudia Marchitelli en diálogo con Clarín sobre las consecuencias de realizarse la intervención. Y aclaró: "La mayoría de las personas que consultan dicen que no pueden llegar al orgasmo y le leyeron que se pueden aplicar algo 'ahí'. La anorgasmia no se resuelve de esa manera".

Por el lado de los hombres, las consultas llegan para "engordar" su miembro. Los especialistas aseguran que se trata de una cirugía peligrosa y que lleva varias horas. Consiste en extraer con una jeringa la grasa alojada en el abdomen o los flancos del varón y dejarla reposar para luego transferirla a los cuerpos cavernosos del pene, pero sin alargarlo".

El presidente de la Sociedad de Cirugía Plástica de Buenos Aires, Juan Carlos Rodríguez, opinó al respecto: "Eso no mejora la perfomance sexual para nada. No hace más funcional al pene. Si se llega a esa práctica es sólo por una cuestión estética o psicológica. Graciela Aguirre, cirujana plástica, agregó: "Que quede más 'gordo' no significa que sea más sólido. Termina siendo un pene para ver pero no para usar. Además este tipo de cirugías puede producir lesiones que deformen el miembro".