Como en cada Navidad, quiero hacerle un buen regalo a la señora y no termino de saber qué: ama los hoteles, departamentos, casas y terrenos, pero ya los tiene.

El cristinismo se pavoneaba con ínfulas de eternidad cuando tropezó con la crisis vicepresidencial más grave de la historia.

Desde el Gobierno se quedaron preocupados por las cosas que dijo Francisco. Se preguntaron si eso de que dejará de recibir a políticos incluye a CFK.

Muchos creen que estoy agradecido con el kirchnerismo porque pude comprar casa, quinta, auto y barco. Pero agradezco poder asistir a encuentros como el del miércoles en Olivos.

Bonadío conoce el oficio de juez y tiene instinto de político. Sin embargo, aseguran que recordó sobre todo un viejo consejo de su madre.

A estas alturas es obvio que detrás del caso Hotesur hay una mano negra. Una conjura: acciones deliberadas para perjudicar a Cristina.

Me parece estar viéndolo ahí paradito, con apariencia de bicho raro. Los que están con él en la foto acaso se pregunten: Por Dios, quién es este pibe.

Los reacomodamientos opositores de los últimos días responden al temor que provoca la posibilidad de un cristinismo desafiante en el próximo período.

Si Cristina mejora día tras día de la sigmoiditis se debe, en primer lugar, a que sus colaboradores más cercanos nos hemos organizado muy bien.

Sucedió una lección práctica de lo que significa el populismo en la economía. Es el gasto desmesurado e inmediato de los recursos del Estado.