Una ex novia de Boudou gestionó los viajes pagados por The Old Fund
Por Hugo Alconada Mon* La ex novia del vicepresidente Amado Boudou, Agustina Seguin, gestionó los viajes de placer y de negocios que The Old Fund pagó...
Seguin intervino en la cuenta de The Old Fund como una de las gerentas de la agencia Swan Turismo. Fue la responsable de emitir los viajes de placer y de negocios que The Old Fund pagó entre 2010 y 2011 para esquiar en Aspen, Colorado, pasear por París o disfrutar del Mundial de fútbol de Sudáfrica, entre otros costosos destinos.
La aparición de esos pasajes pagados por The Old Fund y la confirmación del rol en la operatoria de Seguin, otra figura clave del círculo más íntimo de Boudou durante una década, incrementan las dudas sobre quién controla a esa firma y a la nueva Ciccone, que inició la impresión de billetes por hasta $ 50.000 millones.
Seguin confirmó su rol cuando LA NACION la consultó ayer con una pregunta directa sobre los pasajes. "Sí, pero yo sólo voy a hablar con el fiscal y me voy a remitir a la causa. No tengo nada más que decir", planteó antes de excusarse porque, dijo, se encontraba "en medio de una reunión". Luego, no respondió a las consultas directas y a través de terceros que se le enviaron.
Su rol en la operatoria también había sido adelantado a LA NACION por dos fuentes distintas al tanto de los viajes durante las últimas semanas. Este diario también consultó de manera formal a Swan Turismo, pero sus máximas autoridades declinaron responder las preguntas.
Luego de diez años juntos, Boudou y Seguin terminaron la relación de pareja, pero siguieron en buenos términos. A tal punto que ella también condujo un auto Honda cuyos documentos, endebles, derivaron en una causa que instruye el juez federal Claudio Bonadio.
La nueva pareja del vicepresidente, Agustina Kampfer, también terminó involucrada en un expediente penal. En su caso, en la investigación que instruyen el juez federal Ariel Lijo y el fiscal Jorge Di Lello por el presunto enriquecimiento ilícito de Boudou.
Seguin también se mantuvo en contacto con otro imputado en esta segunda causa penal: el íntimo amigo y socio de Boudou, José María Núñez Carmona, quien a su vez aparece como el principal beneficiario de los viajes pagados por The Old Fund, incluso por encima del presidente de la firma, Alejandro Vandenbroele.
Tal como reveló LA NACION en su edición de ayer, Núñez Carmona protagonizó al menos 19 de esos viajes -once de ellos, acompañado- por tres continentes entre 2010 y 2011, en tanto que el hermano del vicepresidente, Juan Bautista Boudou y su esposa también recibieron cuatro pasajes solventados por The Old Fund para ir y volver a San Diego, California.
Los documentos recolectados por LA NACION durante los últimos dos meses muestran, sin embargo, otros beneficiarios. Entre ellos, el ex socio minoritario de The Old Fund Sergio Gustavo Martínez, el prófugo de la justicia de Estados Unidos.
Martínez viajó a Punta del Este a fines de enero de 2011. Voló junto a su amigo de Mar del Plata, Núñez Carmona. Y para acentuar lo peculiar, viajó cuando ya llevaba tres meses fuera de The Old Fund. Pagado con el cheque 32.859 del Banco Macro, partieron del Aeroparque, con un costo final de 3605,96 pesos.
Cuando regresó de Uruguay, Martínez continuó dentro del círculo que rodea al vicepresidente. Tanto que, apenas unos días después, el 9 de febrero, se presentó en la concesionaria Valfpafe de Parque Patricios -luego rebautizada Madison Automotores, en la Avenida del Libertador al 15.000, en Martínez-, y compró dos camionetas Kia por US$ 27.000 cada una. Para la precandidatura de Boudou a la jefatura de Gobierno porteño.
Caída esa movida, las camionetas se reutilizaron para promocionar la fórmula presidencial del Frente para la Victoria (FPV), Cristina Fernández de Kirchner y Boudou, por las calles de Mar del Plata. Según los vecinos del barrio Los Troncos, ambas camionetas se guardan en el número 3951 de la calle Bernardo de Irigoyen.
Techo a dos aguas, piedra gris y ladrillo a la vista, la particularidad del inmueble no es la casa, sino el poste levantado en el frente con un cartel luminoso que, según recuerdan los vecinos que le adjudican la casa "a Boudou", se utilizó durante todo el verano para promocionar iniciativas del Gobierno y, en particular, la imagen del vicepresidente.
Los registros de viajes de The Old Fund abarcan más nombres. Entre ellos, dos mujeres que volaron con Núñez Carmona. Una, Sabrina Ruiz, es empleada en la Anses; la otra, Sandra Viviana Rizzo, aparece en Action Media -junto al actual subsecretario de Servicios Financieros del Ministerio de Economía, Guido Forcieri-, y en Beaver Cheek, con Martínez, que luego pasó a manos de otro ladero de Núñez Carmona, Juan Carlos López.
Otros beneficiarios son Enrique Motti, quien figura en algunos registros con domicilio en el edificio de los ministerios de Economía y de Planificación Federal, y otras cuatro mujeres: Fabiola Karina Celentano y Constanza Diana Rodríguez -volaron a Miami-, Liliane Balduino -México con escala en Panamá-, y María Florencia Cicchitti, la única empleada declarada por The Old Fund.
Sin embargo, la mayor beneficiaria de los vuelos es la familia Mendiondo: Ignacio y Cecilia, más sus hijos Iñaki, Carlos Ramón, Camila y Macarena. Junto a Núñez Carmona viajaron a Aspen y a Sudáfrica -solventados por The Old Fund-, y al Mundial de Rugby de Nueva Zelanda, entre septiembre y octubre del año pasado (aunque en ese caso el pago no surgió de la empresa dueña de la ex Ciccone).
Así, Boudou mantiene que no conoce a Vandenbroele. Pero este pagó sus expensas, su cable y el teléfono, más vuelos para su socio, su hermano, su cuñada y a una familia amiga, mientras su ex novia de una década tramitó los pasajes.
La aparición de esos pasajes pagados por The Old Fund y la confirmación del rol en la operatoria de Seguin, otra figura clave del círculo más íntimo de Boudou durante una década, incrementan las dudas sobre quién controla a esa firma y a la nueva Ciccone, que inició la impresión de billetes por hasta $ 50.000 millones.
Seguin confirmó su rol cuando LA NACION la consultó ayer con una pregunta directa sobre los pasajes. "Sí, pero yo sólo voy a hablar con el fiscal y me voy a remitir a la causa. No tengo nada más que decir", planteó antes de excusarse porque, dijo, se encontraba "en medio de una reunión". Luego, no respondió a las consultas directas y a través de terceros que se le enviaron.
Su rol en la operatoria también había sido adelantado a LA NACION por dos fuentes distintas al tanto de los viajes durante las últimas semanas. Este diario también consultó de manera formal a Swan Turismo, pero sus máximas autoridades declinaron responder las preguntas.
Luego de diez años juntos, Boudou y Seguin terminaron la relación de pareja, pero siguieron en buenos términos. A tal punto que ella también condujo un auto Honda cuyos documentos, endebles, derivaron en una causa que instruye el juez federal Claudio Bonadio.
La nueva pareja del vicepresidente, Agustina Kampfer, también terminó involucrada en un expediente penal. En su caso, en la investigación que instruyen el juez federal Ariel Lijo y el fiscal Jorge Di Lello por el presunto enriquecimiento ilícito de Boudou.
Seguin también se mantuvo en contacto con otro imputado en esta segunda causa penal: el íntimo amigo y socio de Boudou, José María Núñez Carmona, quien a su vez aparece como el principal beneficiario de los viajes pagados por The Old Fund, incluso por encima del presidente de la firma, Alejandro Vandenbroele.
Tal como reveló LA NACION en su edición de ayer, Núñez Carmona protagonizó al menos 19 de esos viajes -once de ellos, acompañado- por tres continentes entre 2010 y 2011, en tanto que el hermano del vicepresidente, Juan Bautista Boudou y su esposa también recibieron cuatro pasajes solventados por The Old Fund para ir y volver a San Diego, California.
Los documentos recolectados por LA NACION durante los últimos dos meses muestran, sin embargo, otros beneficiarios. Entre ellos, el ex socio minoritario de The Old Fund Sergio Gustavo Martínez, el prófugo de la justicia de Estados Unidos.
Martínez viajó a Punta del Este a fines de enero de 2011. Voló junto a su amigo de Mar del Plata, Núñez Carmona. Y para acentuar lo peculiar, viajó cuando ya llevaba tres meses fuera de The Old Fund. Pagado con el cheque 32.859 del Banco Macro, partieron del Aeroparque, con un costo final de 3605,96 pesos.
Cuando regresó de Uruguay, Martínez continuó dentro del círculo que rodea al vicepresidente. Tanto que, apenas unos días después, el 9 de febrero, se presentó en la concesionaria Valfpafe de Parque Patricios -luego rebautizada Madison Automotores, en la Avenida del Libertador al 15.000, en Martínez-, y compró dos camionetas Kia por US$ 27.000 cada una. Para la precandidatura de Boudou a la jefatura de Gobierno porteño.
Caída esa movida, las camionetas se reutilizaron para promocionar la fórmula presidencial del Frente para la Victoria (FPV), Cristina Fernández de Kirchner y Boudou, por las calles de Mar del Plata. Según los vecinos del barrio Los Troncos, ambas camionetas se guardan en el número 3951 de la calle Bernardo de Irigoyen.
Techo a dos aguas, piedra gris y ladrillo a la vista, la particularidad del inmueble no es la casa, sino el poste levantado en el frente con un cartel luminoso que, según recuerdan los vecinos que le adjudican la casa "a Boudou", se utilizó durante todo el verano para promocionar iniciativas del Gobierno y, en particular, la imagen del vicepresidente.
Los registros de viajes de The Old Fund abarcan más nombres. Entre ellos, dos mujeres que volaron con Núñez Carmona. Una, Sabrina Ruiz, es empleada en la Anses; la otra, Sandra Viviana Rizzo, aparece en Action Media -junto al actual subsecretario de Servicios Financieros del Ministerio de Economía, Guido Forcieri-, y en Beaver Cheek, con Martínez, que luego pasó a manos de otro ladero de Núñez Carmona, Juan Carlos López.
Otros beneficiarios son Enrique Motti, quien figura en algunos registros con domicilio en el edificio de los ministerios de Economía y de Planificación Federal, y otras cuatro mujeres: Fabiola Karina Celentano y Constanza Diana Rodríguez -volaron a Miami-, Liliane Balduino -México con escala en Panamá-, y María Florencia Cicchitti, la única empleada declarada por The Old Fund.
Sin embargo, la mayor beneficiaria de los vuelos es la familia Mendiondo: Ignacio y Cecilia, más sus hijos Iñaki, Carlos Ramón, Camila y Macarena. Junto a Núñez Carmona viajaron a Aspen y a Sudáfrica -solventados por The Old Fund-, y al Mundial de Rugby de Nueva Zelanda, entre septiembre y octubre del año pasado (aunque en ese caso el pago no surgió de la empresa dueña de la ex Ciccone).
Así, Boudou mantiene que no conoce a Vandenbroele. Pero este pagó sus expensas, su cable y el teléfono, más vuelos para su socio, su hermano, su cuñada y a una familia amiga, mientras su ex novia de una década tramitó los pasajes.