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Un grupo pro-vida secuestró a una nena de 12 años violada por su padre que había pedido abortar

La menor y su madre no se presentaron en el hospital el día que se había acordado para la interrupción del embarazo. Fueron halladas en una sede de la organización católica Grávida.

Una niña de 12 años que expresó su voluntad de ser sometida a una interrupción de embarazo provocado por la violación de su padre fue retenida por la agrupación pro vida Grávida y ocultada de las autoridades para evitar que se le practicara el procedimiento.

La menor, oriunda de la localidad de Garibaldi, a 122 kilómetros de la ciudad de Santa Fe, en el departamento Castellanos, en diciembre fue llevada por su madre a un control médico en el cual se reveló que estaba embarazada.

Luego de eso, la niña le contó a su madre que su papá había cometido reiterados abusos contra ella, por lo que el Ministerio Público de la Acusación (MPA) ordenó su captura, que se concretó en las últimas horas en la ciudad santafecina de Recreo.

El hombre, de 42 años e identificado con las iniciales G.M.A., será imputado por el delito de abuso sexual agravado por Alejandra Del Río Ayala, de la Unidad Especial de Género, Familiar y Sexual (Gefas), en una audiencia en principio fijada para este jueves.

La niña había expresado su voluntad de ser sometida a la interrupción del embarazo y su madre la apoyó en la decisión.

Se resolvió, entonces, que la intervención se realizara en el hospital Iturraspe de la ciudad de Santa Fe en la jornada del lunes, pero no se presentaron.

Según consigna el diario UNO de Santa Fe, equipos especializados de la gobernación habían acompañado desde el primer momento a la niña y a su madre y realizaron las gestiones después de Navidad para concretar la interrupción del embarazo. La última conversación entre las partes se llevó a cabo el viernes 30 de diciembre.

Según publica el mismo medio, el fin de semana de Año Nuevo la niña y su madre fueron contactadas por un cura de una localidad vecina para que se acercaran a misa. Desde ahí, sostienen, se quebró el contacto con el Estado.

En ese sentido, se conoció que algunas de las trabajadoras que intervinieron habrían recibido llamadas del presidente de Grávida, una organización fundamentalista católica, en el que las insultó por el acompañamiento.

Ante esa situación, la Justicia inició una investigación para dar con el paradero de la mujer y la niña.

Este martes se supo que representantes de Grávida retuvieron a la niña el lunes, el mismo día que tenía turno para que se le practicara la interrupción del embarazo en el hospital Iturraspe.

La menor fue buscada por sanatorios de toda la ciudad y, finalmente, hallada en una sede de la organización Grávida ubicada en 9 de julio 2663, conocida como Casa Hermanas de Betania.

Ahora, los representantes de Santa Fe de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito pidieron que se investigue si Grávida "quiso obturar el derecho de la niña a la interrupción del embarazo".

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