Ricardo Buryaile remarcó la necesidad de "hablar de una reforma en impuestos laborales"
Para el ministro de Agroindustria, la presión impositiva en Argentina es "asfixiante".
Unos 150 productores y dirigentes de economías regionales se reunieron en un plenario que organizó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) en su sede del microcentro. Alí se presentó el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, qien sostuvo: "Si queremos ser el supermercado del mundo tenemos que potenciar las economías regionales".
En ese sentido, el funcionario del Gobierno reconoció que "cuando hablamos de presión impositiva hay que hablar del gasto público".
Las quejas de los productores no se hicieron esperar: se centraron en la elevada carga tributaria que deben afrontar los distintos complejos. "Es cierto que la Argentina es uno de los países con mayor presión impositiva de la región", apuntó el ministro.
Y continuó: "La presión impositiva asfixia a todos, sin importar si se trata de una PyME o de una empresa grande. Pero quiero darles esperanza: el año que viene vamos a tener un Congreso distinto en donde hablaremos de una reforma en impuestos laborales", agregó Buryaile.
"Para nosotros como gobierno, los empresarios y los trabajadores son parte de la misma cadena. La dirigencia empresarial tendrá que poner cordura porque cuando hablamos de presión impositiva tenemos que hablar de gasto público", profundizó Buryale.
"El 65% del gasto está destinado a lo social. Hay que sostener la política de desarrollo social sin caer en ajuste de planes. Pero sí entendemos que hay otros tipos de gastos que pueden ser reducidos y lo vamos a hacer", agregó.
Además, brindó números del movimiento que generan las economías regionales: "Representan más del 20% de las exportaciones agroindustriales argentinas, que son u$s 35.000 millones y más del 50% de la fuerza laboral del sector", precisó.
"Si queremos ser el supermercado del mundo, tenemos que potenciar las economías regionales. La exportación y el mercado interno no es una dicotomía porque cuando hablamos de exportar, hablamos de generar trabajo argentino", concluyó.
En ese sentido, el funcionario del Gobierno reconoció que "cuando hablamos de presión impositiva hay que hablar del gasto público".
Las quejas de los productores no se hicieron esperar: se centraron en la elevada carga tributaria que deben afrontar los distintos complejos. "Es cierto que la Argentina es uno de los países con mayor presión impositiva de la región", apuntó el ministro.
Y continuó: "La presión impositiva asfixia a todos, sin importar si se trata de una PyME o de una empresa grande. Pero quiero darles esperanza: el año que viene vamos a tener un Congreso distinto en donde hablaremos de una reforma en impuestos laborales", agregó Buryaile.
"Para nosotros como gobierno, los empresarios y los trabajadores son parte de la misma cadena. La dirigencia empresarial tendrá que poner cordura porque cuando hablamos de presión impositiva tenemos que hablar de gasto público", profundizó Buryale.
"El 65% del gasto está destinado a lo social. Hay que sostener la política de desarrollo social sin caer en ajuste de planes. Pero sí entendemos que hay otros tipos de gastos que pueden ser reducidos y lo vamos a hacer", agregó.
Además, brindó números del movimiento que generan las economías regionales: "Representan más del 20% de las exportaciones agroindustriales argentinas, que son u$s 35.000 millones y más del 50% de la fuerza laboral del sector", precisó.
"Si queremos ser el supermercado del mundo, tenemos que potenciar las economías regionales. La exportación y el mercado interno no es una dicotomía porque cuando hablamos de exportar, hablamos de generar trabajo argentino", concluyó.