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Preocupa la salud de Marta Fort pero sus nietos no saben dónde se encuentra internada

Tras una primera internación en el Hospital Italiano, la madre del mediático fue trasladada a una clínica privada donde continúa su rehabilitación.

Marta Fort, la madre del recordado y excéntrico Ricardo Fort, está internada desde los primeros días del mes de enero, inicialmente debido a una trombosis pulmonar, y su estado de salud es endeble, aunque su familia mantiene un estricto hermetismo sobre la situación, al punto de que solo sus hijos Eduardo y Jorge saben a ciencia cierta adónde se encuentra internada en este momento, para evitar filtraciones a la prensa.

El ex abogado de Fort, el doctor César Carroza, admitió extraoficialmente la situación delicada que atraviesa la viuda del hijo del fundador del imperio chocolatero, quien tuvo su etapa más mediática en sintonía a la de su hijo famoso, hasta su muerte.

Marta Fort estuvo internada primero en el Hospital Italiano de Buenos Aires, para ser trasladada luego a un centro de salud privado que no ha trascendido. Estuvo veinte días en coma farmacológico conectada a un respirador artificial, y luego, al presentar mejoras, se produjo el traslado para continuar su rehabilitación. Durante su internación le detectaron un coágulo de sangre alojado en un sector de los pulmones. La madre de Ricardo Fort, de 84 años, fue tratada con anticoagulantes para disolverlo y si bien los médicos se mostraron optimistas y le dijeron a la familia que su estado iría mejorando, el cuadro se complicó por su avanzada edad, un factor que implica un proceso de mayor atención y cuidado.

A pesar de esto, fue respondiendo bien al tratamiento. Con ella estuvo siguiendo de cerca su primera etapa de internación su hijo Eduardo mientras que su otro heredero, Jorge, estaba de viaje y, hasta entonces, no consideraba necesario volver. Antes de ser internada, la mujer se encontraba bien de salud, activa y trabajando. Durante el día, acompañada por una enfermera -no por ninguna patología, sino por su seguridad-, iba a la fábrica de chocolates Felfort, de la que ella y sus hijos son los dueños.

Ahora sigue su tratamiento en otra institución médica que no ha sido revelada ni siquiera para sus nietos, para que la información no se filtre. Sus hijos decidieron trasladarla bajo absoluto hermetismo a una clínica especializada en el barrio de Almagro. Las secuelas más complicadas en la actualidad están relacionadas a su dificultad para el habla.

La familia Fort volvió a ser noticia en los últimos días por los 15 años de Martita, la hija del fallecido empresario que lleva justamente el nombre de su abuela y que tiene una importante presencia en las redes, al igual que su hermano Felipe. "Mis seguidores me buscan porque soy el hijo de Ricardo Fort, pero creo que quiero ser conocido como Felipe Fort, mi propio nombre -dijo su hijo menor en un reportaje-. No quiero que se olviden de lo que hizo mi papá. Me gustaría ser actor por mí y por él, creo que le gustaría la idea. Me gustaba mucho cuando él hacía el musical. Toco la guitarra, el piano y el bajo".

Martita, por su parte, defendió la decisión de su padre de llevar a cabo a este tratamiento para convertirse en padre: "Si una pareja se ama y no puede tener hijos, me parece que el vientre subrogado está perfecto. Sigue habiendo gente retrógrada que piensa que los homosexuales están mal, que tener hijos de un vientre subrogado es muy raro, que no se puede. Que Cristo creó al hombre y a la mujer. Hay personas que aún no caen en la realidad que la ciencia avanzó mucho".

Ahora toda la familia sigue de cerca el proceso de rehabilitación de la jefa de la familia, pese al cerco informativo que sus hijos han realizado.