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Panelistas invitados: La nueva moda de la tv

Mucha gente sentada en un living o un set periodístico parece ser la fórmula. Hablar todos juntos; pisarse y opinar hace que pensemos que menos es más.

Por Adrián Pallares
@adrianpalla

Por Rodrigo Lussich
@rodrigolussich


Un axioma televisivo del presente mediático del minuto a minuto dice que si llenás un estudio de gente, funciona. Mauro Viale -no sabemos cómo lo hace, pero lo consigue- sienta a las siete de la mañana a una manada de personajes en su programa de América, sin que salgan con cara de dormidos. ¿A qué hora se levantó esa gente para ir? ¿A las 5?.

La cosa es que ahí están toda clase de especialistas; opinólogos y aportantes de la nada en muchos casos -en otros no- haciendo bulto porque parece que de eso se trata: que sean muchos, así parece que es mejor.

Nos permitimos el beneficio de la duda. Nosotros creemos que, a veces, "menos es más". "Infama" es otro programa que se caracteriza por sentar a las cinco de la tarde un ejército de mujeres cacareando al unísono y a veces se le vuelve en contra. Ayer, por ejemplo, el programa arranca con un "Último momento" basado en la información de nuestros colegas de Primcias Ya que hablaba de la bronca de Tinelli con Adrián Suar por repetir "Showmatch" en el canal "Volver".

Situación: Marina Calabró sostiene la noticia, música de tragedia, estilo del programa alineado en la noticia. Sientan a Nara Ferragut (?), productora de teatro y televisión, que se encarga de pincharles el globo en treinta segundos. Dice que sabe que Tinelli no está enojado un corno, en contra de la línea editorial del programa. Tensión. Gente incómoda. ¿Con qué necesidad?.

En la locura de sentar mucha gente en paneles, la mitad se quedan callados porque en general no tienen mucho para decir; se inmolan en cuestiones que no les corresponde y por las que en general ni siquiera les pagan. Los "panelistas invitados" abundan; estar en cámara los tienta, aceptan ir y después... más de uno se pregunta para qué fue.

"Animales sueltos" es otro programa que históricamente sienta mucha gente a la medianoche; chicas lindas sin nada para aportar pero bonitas para mirar. A veces la mitad de los invitados se van sin haber abierto la boca más que dos o tres veces. Los "mano a mano" a solas de Fantino, él y un invitado, resultan mucho más interesantes, profundos y miden rating.

Ejemplos abundan. "El diario de Mariana" también tiene un sillón tamaño bondi para que se sienten muchos especialistas. A veces semejantes tumultos se vienen encima de la vista del televidente y uno cree estar en el subte. Estrategias televisivas; tiempos distintos; es lo que hay; mide; garpa... Ponele...