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Muerte de Diego Maradona: el abogado de la enfermera aseguró que presentará “audios reveladores”

Apuntó contra el entorno del exfutbolista, el neurólogo Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov. Aseguró que, si hubiera transitado la internación domiciliaria en otra casa, “hoy estaría vivo”.

Rodolfo Baqué, el abogado de Dahiana Gisela Madrid, la enfermera que atendía a Diego Armando Maradona en el country San Andrés, de Tigre, donde murió el miércoles pasado, se presentó este martes ante la Justicia para “aportar pruebas” e información de un grupo de chat que integraba la mujer. Aseguró que brindará audios “de conversaciones reveladoras” y apuntó contra la casa en la que se encontraba el Diez: “Si hubiera estado en cualquier otro lugar se habría salvado”.

“Presentamos una serie de audios de un grupo de chat donde estaba Madrid y luego fue excluida. Estaban el psicólogo Carlos Díaz; (las hijas) Dalma, Giannina y Jana; la psiquiatra Agustina Cosachov, otro enfermero y Leopoldo Luque”, reveló Baqué al llegar esta tarde a la sede de la Fiscalía General de San Isidro.

Aseguró que realizó la presentación ante los fiscales que investigan las circunstancias en las que murió el Diez y aclaró que no presentará ninguna eximición de prisión, porque su asistida “no está imputada por ahora”.

Según Baqué, a su defendida la contrataron el miércoles 13 de noviembre, es decir, dos días después de la externación de Maradona de la Clínica Olivos, donde lo operaron de un hematoma subdural en la cabeza. “La psiquiatra le daba directivas por la medicación y, además, mantenía conversaciones médicas con el doctor (Leopoldo) Luque”, dijo el abogado.

El letrado aseguró que su defendida había dejado de atender al ídolo porque “la echó”. Sostuvo que, a raíz de eso, “los médicos tratantes y el entorno que convivía con Maradona” determinaron que Madrid estuviera ahí “por si había alguna emergencia” y le indicaron que le alcanzara las medicinas psiquiátricas -que eran las únicas que le daban- hasta la puerta del playroom.

“A partir de eso, se acercaban Maxi o Jony y se las daban a Maradona”, afirmó en referencia a Maximiliano Pomargo, cuñado del abogado Matías Morla y asistente de Diego y Jonathan Espósito, sobrino del Diez.

Sostuvo que habría que “dejar de pensar en Maradona como una persona de mal carácter” y entender que se trataba de “un adicto”. “Maradona la echó a ella, al igual que todo el mundo que le impidiera consumir, no hubo nada especial para echarla”, explicó su representante legal.

Para Baqué, Luque tendrá responsabilidad sobre las cuestiones clínicas, como por ejemplo, “la enfermedad en el corazón”. Por otro lado, resaltó que, si bien la enfermera “tiene experiencia con adictos”, más la tienen los acompañantes terapéuticos.

“No sé si era un paciente psiquiátrico. Se infiere que hay momentos en los que estaba desconectado de la realidad, no sé si por consecuencia de las drogas que tomaba, pero si no era psiquiátrico sí era adicto”, afirmó el abogado. En esa línea, aseguró que cualquier persona que atraviesa ese problema “tiene las mismas actitudes y termina alejándose del círculo que lo rodea y buscando el conflicto”.

Para Baqué, si Maradona hubiese transitado la internación domiciliaria en otra casa “hoy estaría vivo”. Además, apuntó contra quienes estuvieron junto al Diez en sus últimos días. “Cualquiera de nosotros lo hubiésemos llevado corriendo a un centro asistencial, si se caía, si lo veíamos hinchado, si no lo dábamos medicación para el corazón, hubiésemos preguntado”, planteó.

“Deberíamos preguntarnos por qué Maradona no tenía una casa propia. ¿Por qué a un paciente adicto lo vamos cambiando de casas, si él tenía una en Brandsen y el desarraigo en una persona con su condición es preocupante?”, cuestionó.

De acuerdo a sus dichos, “el corazón de Maradona falló porque fue sometido a un esfuerzo extra” que no se contuvo. “El efecto colateral de la medicación que le daban es acelerar el ritmo cardíaco, con lo cual debía tomar un betabloqueante (por la presión arterial). Deberían haberse tomado los recaudos”, aseveró.

Por último, enumeró cuáles fueron, en su opinión, las deficiencias que pudieron haber llevado a Maradona a la muerte: “Que no hubiera acompañante terapéutico ni una ambulancia, que viviera en una casa con un baño químico, que no hubiera un desfibrilador, un tubo de oxígeno ni las medidas mínimas que cualquier familiar habría buscado y brindado”.

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