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La historia oficial

*Por Ricardo Roa. La planta impresora de Clarín estuvo nada menos que 12 horas bloqueada, más de 650 mil diarios impresos no pudieron ser distribuidos y para la ministra Nilda Garré allí no hubo nada anormal.

El comunicado que difundió para explicar por qué el Gobierno se cruzó de brazos frente al piquete es una tomadura de pel o. Describe los contactos que hubo entre policías, funcionarios judiciales y activistas desde las 2 de la mañana. Pero se saltea todo el comienzo de la película : las medidas dispuestas horas antes por la fiscal contravencional y el subcomisario de la zona.

Y encima todo lo cuenta como si ella fuese una cronista y no la ministra de Seguridad, que tenía desde enero una orden judicial de evitar nuevos bloqueos. Claro está, para el caso de que hubiese estado dispuesta a hacerlo.

Si hay algo que queda claro de ese informe, es que Garré pudo haber hecho a medianoche lo que resolvió 12 horas después : "Ordenar a la Policía Federal impulsar a los demandados a través de una acción policial ejercida con prudencia y proporcionalidad al retiro pacífico". Si ésa era una salida posible ¿por qué no la tomó de inmediato ? La conclusión es obvia: dejó que el piquete lograra el propósito de impedir la salida de Clarín .

Garré pasa de cronista a editorialista y comete el error de afirmar que "se trata de un conflicto gremial de larga data entre la empresa AGEA y sus trabajadores".

No hay ningún conflicto gremial en AGEA . Pero, peor que eso, dice que "de ninguna manera quedó afectada la libertad de expresión" y que "se busca dramatizar el episodio". Impedir la circulación de un diario, de cualquier diario, afecta la libertad de expresión . Y no es algo para festejar , a menos que el Gobierno crea que lo es tratándose de Clarín .