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La ANMAT prohibió la comercialización de una marca de bizcochos

La medida fue publicada en el Boletín Oficial. Los productos no aclaraban en su envase la consigna de “puede contener soja”.

Por medio de la disposición 2307/2020 publicada en el Boletín Oficial, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) prohibió la comercialización en todo el territorio nacional de dos variedades de galletitas.

Se trata de los “Bizcochos dulces de hojaldre – snack matero azucarado” y de los “Bizcochos de hojaldre – snack matero salado” de la marca Hojalmar Sociedad Anónima.

La medida se estableció porque los productos no indicaban en su rótulo la respectiva declaración de alérgenos “puede contener soja”.

Se inició la investigación de ambos productos a partir de que una clienta le realizó una consulta a la empresa elaboradora. La mujer es madre de un chico alérgico a la proteína de la leche de vaca y tenía dudas acerca de los ingredientes de las galletitas.

Un análisis evidenció que los bizcochos “son manufacturados en una línea de producción en la que también se elaboraba otro producto que declara en su rotulado reglamentario que ´puede contener Soja´”, expresa el comunicado. De esta forma, pudo haberse producido un contacto o contaminación cruzada con otros alimentos que contienen este componente alérgeno.

La Dirección de Industrias y Productos Alimenticios (DIPA) le solicitó a Hojalmar S.A. que “realice la educación de los rótulos de todos los productos elaborados”.

Por estar falsamente rotulados y a fin de proteger la salud de personas susceptibles a reacciones adversas por alérgenos, los bizcochos tuvieron que ser clasificados como “ilegales”.

El pasado siete de este mismo mes, la ANMAT anunció una alerta de retiro de mercado. El aviso indicaba que la marca debía hacerse cargo de apartar de forma preventiva los productos que no tuvieran la adecuada declaración de alérgenos.

Los alérgenos son sustancias que pueden generar sensibilidad y reacciones alérgicas en el cuerpo (interna o externamente). Aún en cantidades mínimas, estas respuestas pueden ir de leves a graves, pudiendo incluso provocar náuseas, vómitos, erupciones cutáneas, dificultades para respirar o un shock anafiláctico (inflamación del rostro).

En ciertas personas sucede que su propio sistema inmunológico las considera como “peligrosas” o “extrañas”. Algunos alérgenos alimentarios son: el maní, la soja, el trigo, los frutos secos, el huevo, los mariscos y el pescado, entre otros. Un producto apto para consumo humano siempre debe especificar en el apartado de legales de su envase o etiqueta correspondiente si es que posee este tipo de sustancias.

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