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Inhumaron restos del joven asesinado en Baradero

Los restos de Lucas Rotella, el joven de 19 años asesinado por un policía, fueron inhumados este domingo en un cementerio municipal de Baradero, mientras el Gobierno provincial sigue de cerca la situación luego de que un agente de la fuerza de seguridad quedó detenido y separado del cargo.

Decenas de jóvenes y adolescentes siguieron en motocicletas y sin llevar cascos al coche fúnebre que trasladó desde una funeraria los restos de la víctima, que en principio había sido increpada por los policías con la excusa de que no llevaba protección en su cabeza mientras viajaba en ciclomotor.

Miguel Rotella, padre del joven, reclamó este domingo a los políticos que dejen de buscar votos cuando se acercan las elecciones y eduquen a la sociedad "empezando por arriba" y advirtió sobre la falta de controles "psicofísicos" a policías como el que mató a su hijo.

Rotella también se mostró profundamente conmovido por la reacción de los hijos del policía que mató al joven al señalar que fueron a su casa y "pidieron perdón en nombre de su padre".

En Baradero, señaló, "los chicos cometen tonteras pero eso no es para que lo maten por la espalda". "No le pueden tirar con balas de plomo, esa persona estaba sumariada por amenazar a otros chicos", remarcó y admitió que en esa ciudad, donde años atrás un agente de tránsito atropelló con su camioneta a otros dos adolescentes por no respetar las normas de tránsito, "el 99 por ciento de los chicos andan sin casco en Baradero, así de simple".

De ese modo, Rotella cuestionó la excusa que presentó el policía al justificar su acción contra el joven cuando dijo que intentó escapar cuando iban a reprenderlo por no llevar casco. El padre remarcó que cuando estaba herido de gravedad su hijo llegó a decirle: "La policía me tiró, nada más". "No me dijo otra cosa porque tenía un pulmón partido, todos los intestinos destrozados por la bala de plomo", acotó.

Dirigiéndose a funcionarios y políticos, Rotella reclamó "que dejen de buscar votos, no vengan con el sanguchito y la coca para buscar votos y después a la gente no le dan nada. Vienen para el tiempo de las elecciones y después nunca más".

"Tenemos una sociedad que está podrida, tenemos que educarla pero empecemos de arriba", solicitó. En tanto, el intendente Aldo Carossi advirtió hoy que "no hay motivo posible para justificar"
la muerte del joven asesinado.

"Fue un homicidio aberrante, evitable. Es un hecho en el que nadie puede establecer cuáles son las razones que llevaron al policía a terminar con la vida de este chico", dijo.

Carossi señaló que en su ciudad persiste "la problemática del uso de casco y uso de motos. Hay una ley que la población no la recepta". "Nadie usa casco, incluso los chicos", remarcó.
 
El caso es analizado por el Gobierno provincial en La Plata, explicaron a fuentes gubernamentales, al señalar que a dos horas de su llegada al país, el gobernador Daniel Scioli le pidió un informe pormenorizado al ministro de Seguridad, Ricardo Casal.

En principio, el jefe de la Policía bonaerense, Juan Carlos Paggi, dispuso el sábado desafectar de la fuerza y poner a disposición de la justicia al oficial acusado por el crimen.

El agente, que lleva cuatro años en la fuerza de seguridad, fue acusado por el delito de "homicidio calificado" por el fiscal Marcelo Manso.

El comisario Paggi indicó que el policía que disparó con municiones "letales, por ese motivo fue puesto a disposición de la Justicia".