Horror en el Barrio 31: una nena fue abusada durante más de 8 años por el novio de su abuela

Este sábado, detuvieron a un hombre de nacionalidad paraguaya de 49 años acusado de un delito aberrante: abusar sexualmente durante más de 8 años de la nieta de su pareja en su casa de la Villa 31, en la zona del barrio porteño de Retiro. El acusado fue detenido en una casa de la localidad bonaerense de González Catán, partido de La Matanza.

Fuentes policiales indicaron a Infobae que la detención del acusado estuvo a cargo del personal de la División Capturas y Prófugos, dependiente de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía de la Ciudad. La orden de captura fue emitida el 27 de octubre por el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Número Nº17, a cargo del juez Alfredo Godoy, ante la Secretaría Nº153 de Martín Madariaga, luego de que el hombre fuera declarado en rebeldía por la Justicia, tras ser imputado por el hecho.

De acuerdo con la denuncia, A.C. abusó sexualmente de la víctima desde que tenía 6 años. El pedófilo aprovechaba cuando la nena se quedaba sola en la casa de su abuela. El sometimiento hacia la menor se extendió hasta que cumplió los 14.

A partir de la denuncia, el magistrado le solicitó a la división policial realizar una investigación para dar con el paradero del acusado, hasta que finalmente fue hallado en una propiedad ubicada en la calle Juan Manuel Cabot, sin número.

El sospechoso fue trasladado primero a la sede de la Comisaría Tercera de Virrey del Pino y luego derivado al ámbito capitalino para que sea alojado en la Alcaidía 15 de la Policía de la Ciudad.

De acuerdo con las fuentes consultadas por este medio, la Justicia lo imputó de haber abusado sexualmente de la menor, entre los 6 y 10 años de edad. Concretamente, entre el 2014 y 2018. Los detalles son escabrosos: según la investigación, el hombre la sometió a tocamientos en sus partes íntimas en momentos en que notaba que la víctima estaba en la casa de su abuela.

Sobre estos episodios, la nena relató que cuando tenía entre 6 y 7 años, A.C. en algunas oportunidades le corrió la ropa interior para manosearla. Además, señaló que en otro momento, cuando se había quedado a dormir en la casa de su abuela y mientras la mujer se hallaba en el piso de abajo, el hombre se acercó a su habitación y nuevamente la tocó. En aquella oportunidad -declaró- la nena descendió hasta donde estaba su abuela pero no pudo hablar debido al estado de conmoción en el que se encontraba.

En ese sentido, resaltó que el acusado le pidió en tres ocasiones que ella le tocara sus partes íntimas. Sin embargo, la nena siempre se negó, por lo que él le dijo que guardara silencio porque en caso de contar lo que había pasado, iba a generar peleas entre la familia. Un chantaje muchas veces visto en casos de este estilo.

Entre 8 y 10 años, también en el domicilio de la abuela en la Villa 31, la víctima contó que A.C. también la tocó en una oportunidad cuando ella regresó de visita desde Paraguay y también cuando comenzó a vivir nuevamente en la Argentina. Fueron años de horror que no terminaron allí.

El pedófilo también está acusado de, presuntamente, haber inducido a la chica -cuando tenía entre 12 y 14 años de edad- para ir a un hotel en el barrio porteño de Constitución para mantener relaciones sexuales. Para convencerla para que accediera, le ofreció ropa de marca y dinero. Las fuentes señalaron que “la incitó a la práctica prematura de actos sexuales que, debido a su falta de maduración física, psíquica y sexual, condicionaron la libre y plena determinación de su sexualidad”.

Por último, le imputaron un hecho que habría ocurrido el 5 de diciembre de 2022, en horas de la tarde y en la habitación nuevamente en la casa de la abuela. Según se denunció, en aquella ocasión el hombre le tocó la cola.

A.C., de acuerdo con registros oficiales, está inscripto en la Obra Social del Personal de la Construcción y fue empleado de varias empresas del rubro. Por lo pronto deberá responder preguntas en el marco de un expediente que fue calificado con el delito de abuso sexual.