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Google recuerda a Houdini

El megabuscador volvió a cambiar hoy su doodle en homenaje al nacimiento del mítico ilusionista y escapista.

Harry Houdini o Erik Weisz, su nombre real, nació un 24 de marzo de 1874 en Budapest, Hungría. Hijo de una familia humilde que se trasladó cuando él tenía 4 años a los Estados Unidos, comenzó a trabajar desde pequeño, a los 8 años, vendiendo diarios y lustrando zapatos en las calles de Wisconsin.

Al cumplir 9 años, sus amigos del barrio formaron un circo donde el futuro prodigio del escape actuaría por primera vez el 28 de octubre de 1883 como Ehrich, The Prince of the Air. En esa presentación realizó números de trapecio y contorsión.

Tras su inicio en el circo, dejó su hogar familiar y se sumó a circos ambulantes buscando fama y fortuna. Pero luego de un año regresó a su casa, aunque su familia se había mudado a Nueva York. Y fue allí donde a la edad de 13 años consiguió diversas propuestas laborales para mantener a sus familiares.

La magia llegaba a su vida y la practicaba en su tiempo libre, además de competir en eventos atléticos como natación. En ese tiempo consiguió un libro que marcaría su vida "The Memoirs of Robert-Houdin, Ambassador, Author, and Conjuror y modificó su propio apellido asemejándolo al autor de la obra, a quien admiraba.

A través de los años se destacó como un gran mago y un increíble escapista gracias a su entrenamiento como nadador, gran resistencia y su preparación física.

Pero el fallecimiento de su madre lo afectó en gran medida y decidió dedicarse a desenmascarar a los falsos médiums que se abusaban de la credulidad de la gente que quería contactarse con sus seres queridos que habían muerto.

En ese entonces entabló amistad con Sir Conan Doyle, el creador del gran detective Sherlock Holmes, ya que era un creyente del mundo espiritual y paranormal. El escritor creía que las habilidades del mago pertenecían a esta última rama.

Para él la magia era un espectáculo sumamente importante y demostraba en cada acto de escapismo su habilidad para liberarse de cadenas, esposas, camisas de fuerza y cajas fuertes arrojadas al mar.

El último acto del mítico Harry Houdini fue una prueba definitiva contra su tan aborrecido espiritismo. Creó un código secreto que compartió con su mujer, basado en las palabras de una carta que le había enviado su amigo Doyle, y que la comunicaría con él en el plazo de diez años tras su muerte.

Pero transcurrido ese plazo de tiempo, su mujer celebró una última sesión espiritista sin éxito. Fue entonces cuando apagó una vela que simbólicamente había mantenido encendida junto a la fotografía de Houdini y dijo "diez años son suficientes para esperar por cualquier hombre". Desde entonces, es tradición entre los magos celebrar sesiones en las que se invoca al espíritu de Houdini cada 31 de octubre.

Aún en la actualidad los magos del mundo le rinden tributo a su "mentor", un destacado es Criss Angel-Mindfreak, y directores de cine le dedican películas a su misteriosa vida.