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Encontraron un cráneo que sería de un joven buscado hace dos meses por el femicidio de su ex novia

Carolina Ledesma fue asesinada el 19 de febrero pasado en Santiago del Estero. Ese mismo día también, su exnovio, Matías Loto, desapareció de los lugares que solía frecuentar.

Después de más de dos meses de búsqueda, el misterio alrededor del paradero del presunto femicida de Carolina Ledesma, la joven que encontraron muerta el pasado 19 de febrero con golpes en todo el cuerpo y una sábana alrededor del cuello en la localidad santiagueña de Fernández, estaría a punto de resolverse.

En medio de un rastrillaje del que participaron cerca de 160 policías en una zona de tupida vegetación, a unas dos cuadras del cementerio local, este lunes encontraron un cráneo con dientes a muy pocos metros del DNI de Matías Loto, el exnovio de la mujer asesinada.

Los efectivos avanzaron entonces con el operativo en el terreno para dar con el resto del cuerpo que, aparentemente, había sido arratrado por animales. Así, cerca del lugar en donde apareció la cabeza, hallaron también otros huesos: fémur, húmeros y falanges, que serán peritados para confirmar, o no, la identidad del sospechoso.

Según informaron los medios locales, los investigadores dieron además en ese sector con el celular de Loto, una remera color beige y una bermuda negra, que coinciden con la ropa que llevaba puesta la última vez que lo vieron, y con una escopeta calibre 16 con tres cartuchos.

En la escena trabajaron peritos de Antropología forense, de la División Criminalística y de la policía Científica. Estos últimos fueron los encargados de levantar todas las evidencias.

 

El femicidio de Carolina Ledesma

De acuerdo a la reconstrucción, durante la madrugada del 19 de febrero pasado Matías Loto llegó en su moto hasta la casa donde vivía su exnovia Carolina Ledesma, saltó el cerco perimetral y sorprendió a la joven cuando dormía.

La joven, que tenía 22 años, se defendió como pudo, pero el femicida la sometió, le pasó una sábana alrededor del cuello y la asfixió hasta matarla. El cuerpo lo encontró la mamá de la víctima cerca de las 20, cuando decidió ir a buscarla al no poder comunicarse por teléfono con ella. Ese mismo día también, Loto desapareció de todos los lugares que solía frecuentar.

Con el avance de la investigación, la autopsia determinó que Carolina murió por “asfixia mecánica”. Pero además presentaba golpes y patadas en todo el cuerpo: en el estómago, las piernas y entrepiernas, en uno de sus ojos y en la nariz.

(Fuente: TN)

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