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El único detenido por el crimen de Leonardo Longo negó haber sido el homicida

El detenido, un taxista de 35 años, está imputado por el delito de "homicidio".

El único detenido por el crimen del comerciante Leonardo Longo, ocurrido el martes 12 en Belgrano, negó haber participado en el hecho, aunque para la Justicia existen pruebas que lo incriminarían directamente.

El detenido, un taxista de 35 años, está imputado por el delito de "homicidio" cometido contra Leonardo Darío Longo, de 41, mientras éste estaba sentado frente a un edificio de la calle 11 de Septiembre al 2000, en el barrio de Belgrano.

Según consta en la causa, ese día Longo aguardaba a que su hijo de 9 años terminara su sesión en la psicóloga, cuando en un determinado momento un hombre encapuchado se le acercó y sin mediar palabra le pegó un tiro en la cabeza que le causó la muerte.

El viernes por la noche, la División Homicidios de la Policía Federal y personal de la comisaría 33 detuvo al taxista en su vivienda del Bajo Flores y en el allanamiento realizado en su casa se le secuestró un arma.

Sin embargo, en la declaración brindada ante la fiscalía a cargo de Juan Necol, el detenido negó haber sido el autor de la muerte de Longo, y señaló que en ese momento estaba en otro lugar.

El sujeto fue sometido a una rueda de reconocimiento, de la que participó una pareja que fue la primera que llegó al lugar y observó cómo mataban a Longo, y ahora la Justicia deberá realizarle pericias psicológicas.

Para la investigación se descarta de plano que a Longo lo hayan querido asaltar, ya que directamente lo fueron a matar, y además también quedó de lado la posibilidad de que a la víctima lo haya ultimado un "sicario", por lo que se investiga al detenido como el posible autor material del hecho.

Precisamente el detenido es la pareja de la ex esposa de Longo, con quien la víctima tenía un hijo de 9 años del que él había obtenido la tenencia definitiva tras varios procesos judiciales.

De lo que se desprende en la investigación, que ahora la Justicia deberá comprobar y profundizar, es que la pareja de la ex esposa de Longo no quería que la víctima tuviera contacto con ella, por lo cual -según la familia de la víctima- "lo amenazaba de manera constante".

Lo que también tiene que investigar la Justicia, como prueba para aportar en la causa, es si alguna de las cámaras de seguridad apostadas en la cuadra en donde mataron a Longo pudo registrar, o bien el momento del crimen, o tal vez la presencia de una persona que -según los testigos- actuó disfrazado y se fue caminando del lugar con un arma en la mano.

Ahora el juez Feliciano Ríos, titular del juzgado Nacional en lo Criminal 46 que tiene a su cargo la causa, podría pedir otro tipo de pruebas para determinar la autoría o no del detenido en el crimen y en todo caso dictar la prisión preventiva si lo considerara pertinente.